Alimentación

Iniciativa pionera para ofrecer comida sana en el hospital

El espacio de comida saludable del Ruber Internacional ha incorporado, tanto en la cafetería como en las máquinas de vending, productos sin azúcares añadidos ni grasas saturadas

El centro sanitario garantiza una dieta saludable y sana para pacientes y acompañantes
El centro sanitario garantiza una dieta saludable y sana para pacientes y acompañanteslarazon

El espacio de comida saludable del Ruber Internacional ha incorporado, tanto en la cafetería como en las máquinas de vending, productos sin azúcares añadidos ni grasas saturadas

Adiós a las grasas saturadas y azúcares para dar la bienvenida a los productos sanos y artesanos es la nueva iniciativa promovida pro el Hospital Ruber Internacional de Madrid. Más de cien especialistas en nutrición, endocrinos, endocrinos pediátricos y médicos internistas intervienen en el proceso de alimentación y en una cuidada selección de las materias primas para crear el primer espacio de comida saludable en el centro sanitario integrado en Quirónsalud. Una cocina de mercado que apuesta por los productos de temporada y de primera calidad, menús controlados en grasa y bajos en sodio vigilando los azúcares añadidos y sustituyendo la bollería industrial por la artesanal.

Tatiana Medina, nutricionista del Hospital Ruber Internacional explica que «el concepto de espacio saludable surgió ante la necesidad de extender los criterios de una dieta equilibrada a todos los ámbitos del hospital, vending y cafetería y no sólo las dietas terapéuticas de los pacientes ingresados. Así, aportamos un valor añadido a la actividad asistencial, preocupándonos de todos los aspectos que pueden influir en nuestros usuarios. Además, no podemos mirar hacia otro lado ante datos como los del último congreso de Obesidad que nos advierte que en 2030 seis de cada diez mujeres y siete de cada diez hombres padecerán sobrepeso en Europa, lo que conlleva un aumento del riesgo de padecer enfermedad cardiovascular, diabetes, etc».

Selección

A la hora de seleccionar los productos que, tanto pacientes como acompañantes, se van a encontrar en las máquinas de vending, Medina aclara que «analizamos nutricionalmente los productos disponibles en el mercado y escogemos alimentos ricos en fibra y calcio pero bajos en grasas, especialmente saturadas, azúcares simples y sodio. Además tratamos de ofrecer calidad y variedad con productos orgánicos, frutas frescas, smoothies de fruta natural, frutos secos naturales, etc. Por otro lado, hemos prescindido de bollería industrial, bebidas ricas en azúcares, frutos secos fritos salados y sándwiches cargados de mahonesa o crema de queso con embutidos de mala calidad».

Este cambio también se ha hecho extensivo para los pacientes ingresados o que decidan comer en el hospital. Para ello, prosigue la nutricionista, «hemos ido reduciendo la cantidad de grasas, sodio y azúcares añadidos, ofreciendo unos menús variados que cuentan con dos raciones de verdura y tres de fruta al día, incluyendo legumbres cocinadas sin grasa, mínimo dos día en semana, pescados azules y carnes magras, pan y pastas integrales, gran variedad de frutas frescas y zumo de naranja natural. Siempre con elaboraciones culinarias distintas y cuidadas ya que no podemos olvidar que nuestros platos tienen que seguir siendo apetecibles y que las dietas deben adaptarse a los requerimientos y gustos de los pacientes para paliar la pérdida de apetito y la desnutrición».

El espacio de comida saludable también tiene en cuenta a pacientes con alergias e intolerancias alimentarias. «Disponemos de productos específicos sin gluten y sin lactosa que es lo más común y confeccionamos los menús a medida para aquellos cuyas alergias e intolerancias sean más complejas», aclara Medina. Próximamente otros hospitales de Quirónsalud se sumarán a esta iniciativa que ha tenido una excelente respuesta por parte del público general.