Medicamentos

Hallan el principal problema de la vacuna contra el VIH

Un médico de una ONG con una vacuna contra el sida en Kenia, en una imagen de archivo
Un médico de una ONG con una vacuna contra el sida en Kenia, en una imagen de archivolarazon

Un equipo de científicos de Estados Unidos detectó uno de los principales motivos por el que las vacunas desarrolladas hasta la fecha contra el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) han resultado ineficaces, según un estudio que publica la revista Science Translational Medicine, informa Efe.

El estudio, que dirige la Universidad de Duke, en Durham, en Carolina del Norte, en EEUU, señala una de las principales trabas en la búsqueda de una vacuna contra el VIH y apunta el camino a seguir de futuras investigaciones.

Debido a la rápida mutación del VIH, la vacuna contra el virus necesita provocar una respuesta inmunológica contra una variedad de cepas de VIH.

Sin embargo, las sucesivas vacunas desarrolladas hasta ahora para combatir el VIH atacando múltiples blancos no han conseguido detener la reproducción de los llamados «anticuerpos ampliamente neutralizantes».

El estudio dirigido por el doctor Ruijun Zhang, de la Universidad de Duke, señala que el foco se debe centrar precisamente en estos «anticuerpos ampliamente neutralizantes», que están controlados por el virus del VIH.

Por eso, señala Zhang, una vacuna exitosa contra el VIH necesita superar todos los mecanismos de tolerancia inmunológica, un campo en el que todavía queda mucha investigación pendiente.

El estudio se ha llevado a cabo en ratones y macacos y los investigadores encontraron idénticos resultados en los ensayos con ambos animales.

La infección de VIH produce un deterioro progresivo del sistema inmunitario, que llega al estado de «deficiente» cuando deja de cumplir su función de lucha contra las infecciones y enfermedades.

El síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) constituye la situación más avanzada de la infección por VIH.

Erradicar el sida en 2030 es el gran objetivo de Naciones Unidas, que cifra en 37 millones las personas que viven con la enfermedad en el mundo.

Efe