Perú

Energía renovable para alumbrar el emprendimiento

Gracias al programa Luz en Casa de la Fundación Acciona Microenergía, más de 11.000 personas cuentan con acceso a este servicio básico en Latinoamérica. Además, desde hace un año se ha creado una red de emprendedores locales que ofrecen mantenimiento y crean riqueza en estos vecindarios aislados

Energía renovable para alumbrar el emprendimiento
Energía renovable para alumbrar el emprendimientolarazon

Gracias al programa Luz en Casa de la Fundación Acciona Microenergía, más de 11.000 personas cuentan con acceso a este servicio básico en Latinoamérica

Hace ocho años, la Fundación Acciona Microenergía, que se centra en el acceso universal a la energía, comenzó su labor en Perú. El Departamento de Cajamarca es una de esas zonas rurales aisladas de las redes eléctricas en las que la tecnología fotovoltaica no sólo supone una forma asequible de dotar de luz a las familias (llevar electricidad convencional a través de líneas de cable resulta caro e inabordable) sino que significa llevar otros servicios básicos como la educación y crear riqueza. Gracias a un panel solar de 80 vatios, una batería y dos puntos de luz LED de seis vatios por cada vivienda, alrededor de 4.000 familias ya cuentan con el servicio de luz sólo en Perú.

El programa de la Fundación, que se denomina Luz en Casa, se encuentra activo en esta región de Perú y en el estado de Oaxaca en México, donde se han beneficiado otras 7.500 familias. Tanto la instalación como los servicios de acceso y mantenimiento son implementados a través de la creación de una empresa social en cada uno de los países donde se opera. De esta manera, el usuario recibe su servicio mediante estos sistemas solares. Los beneficiados realizan una muy pequeña aportación económica que sirve para garantizar la viabilidad económica del sistema a largo plazo y que a los usuarios les aporta un ahorro económico respecto a la compra de velas y otros sistemas de iluminación.

La Fundación no sólo se ha limitado a crear bienestar a través de este servicios básicos. En 2015, a través de la empresa social local de Perú, quiso dar un paso más para fomentar la creación de riqueza rural, a través del establecimiento de un mercado de trabajo, y dar servicio desde y para la base de la pirámide social. «Nos dimos cuenta de que usaban luz sólo para iluminarse, pero no estaban aprovechando todas las ventajas que conlleva el contar con electricidad en el hogar. En muchos casos porque los equipos a su disposición no eran compatibles con la tecnología eléctrica», explica Julio Eisman, director gerente de la Fundación Acciona Microenergía.

Microfranquicias

Así, desde hace un año, se han establecido microfranquicias o microempresas sociales regentadas por emprendedores locales escogidos entre los beneficiarios de sus proyectos. A los técnicos, elegidos entre las familias que ya se han beneficiado del programa Luz en Casa, se les dota de un stock de productos y se les da la formación necesaria para que puedan desarrollar habilidades de mantenimiento. «En este modelo, Acciona Microenergía capacita a los emprendedores desde el punto de vista técnico y de negocio para vender repuestos y prestar servicios de instalación y reparación de los equipos de electrificación, facilitando la financiación del stock inicial y la venta de los equipos y proveyendo a precio competitivo aparatos de calidad y de alta eficiencia energética», explican los responsables del proyecto de la Fundación Acciona Microenergía.

Colaboran en el proyecto, junto a la Fundación Acciona Microenergía, la Fundación de Ingenieros del ICAI para el Desarrollo y del Centro para la Innovación en tecnologías para el Desarrollo Humano de la Universidad Politécnica de Madrid. Además, cuenta con la cofinanciación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo.

A día de hoy se han formado 40 técnicos, de los que 12 ya cuentan con su propio punto de venta y asistencia, llamados Centros Luz en Casa. «Capacitamos también a las familias para que atiendan las necesidades de la comunidad en las tiendas cuando los técnicos emprendedores tienen que salir a hacer alguna operación fuera. Estos centros tienen tres objetivos: dar asistencia técnica, permitir a los usuarios que profundicen en el aprovechamiento de las posibilidades que les brinda la conexión a la electricidad más allá de la luz (equipos informáticos básicos, móviles...), lo que redunda en su calidad de vida, y por último la creación de desarrollo laboral», explica José Gabriel Martín Fernández, gerente de Proyectos de la Fundación Acciona Microenergía. La creación de estos centros va acompañada de un estudio previo de la demanda de productos y un análisis de la fiabilidad y durabilidad de los equipos que se pondrán a la venta, de manera que los usuarios tienen hasta dos años de garantía para cada aparato.

El balance de este primer año de vida arroja los siguientes datos: «Se compran aparatos que consumen poco. Los aparatos de TV elegidos para su venta son de 15 pulgadas y poco consumo y las radios sustituyen a las viejas de pilas. Además, a final de año la conexión resulta más barata que el gasto en pilas de respuesto. A lo largo de este primer año se han vendido sobre todo focos nuevos (en total 150 unidades), cargadores para los móviles (unos 100), 11 tablets y ocho DVD portátiles», explica José Gabriel Martín.

Gilmer, emprendedor del distrito de Tumbadén y uno de los emprendedores que ostentan el mayor registro de ventas en su zona, comenta: «Ser técnico emprendedor para mí es una oportunidad de crecimiento personal y familiar. Antes de tener un negocio de venta de artefactos, mis ingresos económicos eran bajos. Hoy tengo mejores ingresos que sirven para poder mejorar la alimentación y salud de mis hijos».

También en México

Otro de los puntos principales de actividad del programa Luz en Casa es México. En ese país se han instalado, desde 2012, 7.500 sistemas con baterías de ion litio, LED de alta eficiencia y baterías muy pequeñas. Es aquí donde se quiere replicar ahora el sistema de emprendimiento social pionero de Perú. «Allí las instalaciones y servicios nacieron con apoyo público de la municipalidad, que cede una persona a los llamados Centros de Atención al Usuario. Ahora queremos reconvertir estos puestos en Centros Luz en Casa», explica José Gabriel Martín.

Es decir, que, aunque cada programa funcione de forma independiente y teniendo en cuenta las circunstancias de cada país, los sistemas se retroalimentan constantemente. De hecho, el siguiente paso que se quiere dar en ambos países es seguir ampliando la zona de cobertura de electricidad y alumbrado renovable y aprovechar las ventajas que las evoluciones tecnológicas ofrecen en sistemas fotovoltaicos para conseguir penetrar en áreas todavía más aisladas, que a día de hoy se iluminan sólo con velas. Hay que tener en cuenta que «el 60 por ciento del territorio en Perú se encuentra en la Amazonia. Otra parte importante está en los Andes, donde cada casa está situada a bastantes kilómetros de distancia de la siguiente», concluye Eisman.