Alergias

Cuidados básicos para la piel atópica

Cuidados básicos para la piel atópica
Cuidados básicos para la piel atópicalarazon

La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria de la piel, cada vez más frecuente, y se manifiesta por brotes de inflamación con lesiones que provocan mucho picor, y por tanto, molestia para el paciente

La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria de la piel, cada vez más frecuente, y se manifiesta por brotes de inflamación con lesiones que provocan mucho picor, y por tanto, molestia para el paciente.Tiene un cierto componente hereditario, y su prevalencia varía de unas zonas geográficas a otras; en general es mayor cuanto más al norte se sitúa el área estudiada y cuanto más alto es su nivel de desarrollo industrial. Se asocia a una piel seca que se irrita con mucha facilidad, debido a cambios en la estructura de las grasas superficiales de la epidermis, provocando una disfunción en la barrera cutánea. Afecta más a los niños, y entre un 5 y 10% de la población infantil española tiene manifestaciones de dermatitis atópica. Aunque, en general, mejora e incluso desaparece con la edad, en algunas personas se puede cronificar y mantener toda la vida.

Para las fases de brote, es el médico dermatólogo quien debe prescribir el tratamiento adecuado para las lesiones, pero en las fases entre brotes, el farmacéutico, dentro de su labor de asesoramiento, nos puede orientar en los cuidados de higiene e hidratación diaria adecuados, fundamentales para tratar de distanciar y disminuir estas fases que causan tanto malestar.

Los cuidados fundamentales serán un gel de baño y una loción corporal específicos para pieles atópicas. El gel debe limpiar la piel muy suavemente, respetando su pH, sin resecarla. Deberá incorporar tensioactivos suaves; agentes humectantes para mantener la piel hidratada, y algún activo de acción calmante (como el extracto de camomila y el bisabolol) que favorezca la sensación de confort. Y así obtener una piel limpia y protegida, sin dejar sensación de tirantez o sequedad. El baño en estas personas debe ser con agua tibia, un corto y con un masaje suave, sin frotar. Igualmente, para secar, también con toques suaves y sin frotar. A continuación, siempre se debe aplicar una loción corporal para proteger la piel. Ésta debe contener agentes que refuercen la barrera de la piel, alivien la sensación de tirantez, y la sequedad, mantengan la piel hidratada por largo tiempo. Su uso diario ayudará a que las fases de brote se distancien en el tiempo, y sean cada vez más leves, y proporcionarán confort a la piel atópica.

Otros consejos que ha de tener en cuenta el paciente con atopia son: vestir con ropa de algodón, evitando lana y tejidos sintéticos. A la hora de lavar la ropa, no usar suavizantes, y aclararla muy bien, con abundante agua, para eliminar por completo los residuos de jabones. Evitar los cambios bruscos de temperatura, y los ambientes con baja humedad, ya que la sequedad provoca prurito. Para ello, es recomendable el empleo de humidificadores, como los ultrasónicos. También hay que rehuir de colonias, perfumes, etc., ya que por su contenido en alcohol resecan la piel. Y en caso de uso, que sea sobre la ropa, no en la piel.