Farmacia

Infarma 2017: La botica aspira a nuevas prestaciones sanitarias

En esta edición del Salón Europeo de la Farmacia, organizado por los colegios de profesionales de Madrid y Barcelona, la promoción del rol del boticario en el Sistema Nacional de Salud (SNS) ha sido uno de los ejes principales de las mesas de debate, junto con la puesta en marcha del nuevo sistema de verificación de medicamentos (SEVeM), que evita la temida falsificación

Infarma 2017: La botica aspira a nuevas prestaciones sanitarias
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El modelo de farmacia español es uno de los sistemas de colaboración público privada que mejor funcionan en nuestro país y que mejor acogida tienen entre la ciudadanía.

El modelo de farmacia español es uno de los sistemas de colaboración público privada que mejor funcionan en nuestro país y que mejor acogida tienen entre la ciudadanía. Y con esto que bien saben los profesionales de la botica no cesan las ideas para mejorarlo y adaptarse a los nuevos tiempos. Aquí, Infarma, el Salón Europeo de la Farmacia, supone un punto de reunión anual, que alterna las ciudades de Madrid y Barcelona en su celebración –en esta ocasión tocó la Ciudad Condal–, en el que los farmacéuticos debaten y ponen sobre la mesas los temas que más les preocupan.

Los asuntos que han abordado las mesas de debate y los talleres son un pulso tomado a la profesión y han girado en torno a asuntos tan importantes como la implantación y desarrollo de SEVeM (Servicio de Español de Verificación de Medicamentos), la prestación farmacéutica integrada dentro del SNS y el papel de la red centinela de farmacias. En este sentido Jesús Aguilar, presidente del Ceonsejo General de Colegios Oficiales de Farmacia, apuntó durante su intervención en la inauguración de la feria que «ahora es el momento de establecer la prestación de servicios de la cartera farmacéutica. También debemos abordar cómo poner fin a la dispensación hospitalaria y que muchos de los fármacos puedan encontrarse en laoficina de farmacia, sin que ello suponga un retroceso en la calidad». Aguilar también subrayó la gran actividad de la profesión, que se adelanta en muchas ocasiones a las necesidades de los pacientes.

Más seguridad

El 9 de febrero de 2019 es la fecha establecida para que sea obligatoria y definitiva la implantación del nuevo Sistema Español de Verificación de Medicamentos (SEVeM). Así lo manifestó María Angels Figuerola, directora general del SEVeM, durante la mesa redonda «Cada medicamento, una identidad. ¿Qué nos aportará la implementación del sistema de verificación de medicamentos (SEVeM)?», moderada por Joan Calduch, tesorero del Colegio de Farmacéuticos de Barcelona (COFB). Con este sistema, «cada medicamento estará identificado de forma única, como si fuera un DNI» para evitar falsificaciones y manipulaciones, cumpliendo así con la directiva europea 2001/83 y la Directiva de Medicamentos Falsificados de la Unión Europea. Las fases de desarrollo del programa iniciará las primeras pruebas piloto en laboratorio y farmacias el próximo mes de julio.

Emili Esteve, director del departamento técnico de Farmaindustria, afirmó que la industria debe hacer una importante labor en la implantación del SEVeM para incorporar los nuevos códigos y aplicar diferentes dispositivos de seguridad en los envases según cada caso. Según se comentó durante la sesión, los medicamentos genéricos también estarán incluidos en el nuevo sistema, ya que están obligados por la normativa, aunque por su precio no exista un riesgo alto de falsificación, como apuntó, Ángel Luís Rodríguez de la Cuerda, director general de la Asociación Española de Medicamentos Genéricos.

El nuevo sistema requerirá la adaptación del software y de los envases para adaptarlos a los nuevos códigos, como explicó Eladio González, presidente de Fedifar, quién mostró el papel que la distribución tendrá en este proceso. «Los distribuidores deberán verificar la autenticidad del identificador único y desactivar el código en el caso de que sean medicamentos que vayan fuera de la Unión Europea, estén caducados o se hayan de destruir». González no dio cifras concretas, pero sí apuntó que el nuevo sistema tendrá un coste para los distribuidores en cuanto a la adaptación del software y de los envases, así como la incorporación de nuevos lectores de data matrix, aunque reconoció que la inversión, en este caso, será considerablemente menor que para la industria. Luis Amaro, secretario general del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de España, explicó que los Colegios Oficiales de Farmacéuticos «somos los que estamos proporcionando las herramientas de comunicación y gestión». Amaro también comentó la complejidad que supondrá integrar en el nuevo sistema los 17 modelos existentes actualmente de receta electrónica.

El vicepresidente de la distribuidora farmacéutica Grupo Cofares, Juan Ignacio Güenechea, urgió a poner sobre la mesa el Real Decreto de Precios y Financiación porque ha avisado que es «absolutamente necesario» para evitar el «caos» en el sector. «Nos puede gustar más o menos el contenido de los decretos pero realmente hace falta regularlo», que recoge en una entrevista Efe. Güenechea también ha llamado a revisar la normativa relativa a los fármacos de diagnóstico hospitalario, que salieron de las boticas de las farmacias y ahora se dispensan a los hospitales, y ha defendido que ha llegado el momento de dejar atrás algunas normativas que «carecen de sentido» una vez superada la crisis económica.

Dado el carácter internacional de la cita, también cabe destacar la presencia de ponentes extranjeros que abordaron temas candentes para la farmacia española. Darragh O’Loughlin, secretario general de la Unión Profesional de Farmacias de Dublín (Irlanda), explicó cómo la dispensación de medicinas especializadas o altamente tecnológicas se hace a través de las oficinas de farmacia desde 1996, aunque antes se hacía sólo en hospitales. «Los pacientes tenían que hacer el viaje para recibir estos medicamentos que, además, son de muy alto coste. Cuando el especialista diagnostica y hace la receta para el paciente, éste tiene que elegir una farmacia a la que se enviará directamente la medicación; el coste lo paga el sistema sanitario. Los farmacéuticos se encargan de darle toda la información al paciente, los consejos necesarios, les informan sobre cómo utilizar los dispositivos y cómo manejar su tratamiento», comentó O’Loughlin, durante en su intervención en «¿Qué servicios se están prestando en el ámbito internacional?».

Del hospital a la botica

Así, durante la mesa «MHDA (Medicamentos hospitalarios de dispensación ambulatoria): criterios de dispensación. Un debate abierto», representantes de la profesión farmacéutica, administraciones sanitarias y pacientes debatieron sobre cómo fijar las bases de estas dispensaciones. Jordi Casas, secretario del COFB, explicó que el debate se centra en el listado de 269 medicamentos y 65 principios activos que, por medio de modificaciones legislativas, «fueron incluidos como medicamentos con reservas singulares de dispensación y pasaron a darse en los servicios de farmacia de hospital». María Antònia Mangues, directora del Servicio de Farmacia en el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona, apeló a la necesidad de «disminuir el impacto de los resultados negativos asociados a la medicación y el problema mundial con la adherencia terapéutica» y que trascendería el debate sobre los medicamentos de dispensación ambulatoria.

Ramón Palop, jefe de la Unidad de Apoyo a la Dirección de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, acotó la necesidad de enmarcar el debate sobre el ámbito de dispensación de estos medicamentos en torno a tres binomios que «marcan la actualidad: sostenibilidad-accesibilidad, que el sistema de salud se beneficiará si se mantiene el equilibrio entre ambos; equidad-cohesión, el sistema necesita tener equidad y cohesionarse y es algo que demanda la ciudadanía, y cronicidad-longevidad, que marcan el cambio de la asistencia sanitaria». Además, recordó que el Ministerio de Sanidad tendió la mano al Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos para «ver qué medicamentos podían pasar al ámbito de la oficina de farmacia». Mangués concluyó que «lo ideal serían un sistema integrado de farmacia asistencial que permita enfocar resultados en salud y que, por supuesto, haga el sistema sostenible».

Más pruebas diagnósticas en la oficina

«El farmacéutico podría jugar un papel importante en las pruebas de autodiagnóstico para detectar posibles patologías y realizar cribajes». Así de rotundo se mostró Vicente Varea, gastroenterólogo pediátrico, durante la mesa de debate celebrada ayer en Infarma «Pruebas de autodiagnóstico: marco legal y futuro para la farmacia», quien también defendió la importancia de actuar con el objetivo de conseguir el beneficio para la población y considerar los riesgos que pueden conllevar. La legislación actual contempla que este tipo de pruebas de autodiagnóstico se vendan al público exclusivamente a través de las farmacias y con la prescripción médica correspondiente, que no es necesaria en los productos de embarazo, fertilidad, así como para algunos test para determinar la glucemia.

«Los autotests deben ser pruebas sencillas que sirvan para que el paciente controle su enfermedad o haga seguimiento de su patología»,afirmó Mª Carmen Abad, jefa del departamento de Productos Sanitarios de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps), que advirtió que no debemos confundir autodiagnóstico con algunos test rápidos. «Estamos en un momento de mucha innovación. Van a llegar herramientas nuevas y necesitaremos un entorno que las promueva y no las restrinja», anunció Jordi Guinovart, farmacéutico y director general de Hartmann España, respecto a próximas novedades que pueden aparecer en ámbitos como pruebas de intolerancia al gluten, infecciones gastro-intestinales, detección de la bacteria Helicobacter Pylori, entre otras patologías.

Mucho más que cifras avalan la cita del sector

Más de 30.000 profesionales de la botica se acercaron a la cita imprescindible del sector. Este año la Ciudad Condal ha recibido un 20% más de visitantes que la edición de 2015, y esto ha sido gracias a que el aumento de un 10% de los metros cuadrados respecto a la edición anterior ha repercutido en un 10% de asistencia mayor de empresas del sector. Por eso, en la zona de exposición se dieron cita las novedades en medicamentos, sujetos y no sujetos a prescripción médica, genéricos, dermofarmacia, nutrifarmacia, parafarmacia, complementos alimenticios, fitoterapia, productos sanitarios, material de cura, higiene y protección, óptica, ortopedia y pediatría. Todo en conjunto refleja que la farmacia española es un punto de referencia a nivel europeo y goza de una buena salud, pese al marco de crisis en el que ha vivido los últimos años.