Farmacia

Innovación sanitaria: plan de choque para apuntalar el sistema

Profesionales de gestión sanitaria se reúnen en la sede de LA RAZÓN para proponer soluciones ante la falta de coordinación en las políticas de aprobación e inclusión de estos fármacos en el sistema sanitario

Innovación sanitaria: plan de choque para apuntalar el sistema
Innovación sanitaria: plan de choque para apuntalar el sistemalarazon

Profesionales de gestión sanitaria se reúnen en la sede de LA RAZÓN para proponer soluciones ante la falta de coordinación en las políticas de aprobación e inclusión de estos fármacos en el sistema sanitario

Constituye uno de los temas capitales para nuestro sistema sanitario pero, sobre todo, para los pacientes. La financiación de medicamentos innovadores que llegan al mercado genera la disyuntiva política y social de incluir en la cartera de prestaciones del Sistema Nacional de Salud estos fármacos, que curan y mejoran la calidad de vida (en una etapa donde la limitación presupuestaria es más que nunca un lastre para las comunidades autónomas), o dejar que lleguen tarde y continúen rompiendo la equidad en la accesibilidad de los tratamientos. Para abordar este problema, un amplio grupo de expertos en prestación farmacéutica, así como de servicios dentro de hospitales y representantes políticos de diferentes autonomías, se reunieron en la casa de LA RAZÓN en un foro de debate patrocinado por Novartis, en colaboración con Rivera Salud y los laboratorios Rovi.

Bajo el título «Financiación y gestión de la prestación de la asistencia farmacéutica» y organizado junto con la Fundación Bamberg, los ponentes coincidieron en que existe una clara infrafinanciación, así como una imperiosa necesidad de una mayor coordinación en la gestión. «Hay un retraso poco justificado en que llegue al paciente un medicamento que la Agencia Europea aprueba y eso conlleva que se rompa la equidad y hace que no haya la misma disponibilidad. Esto ocurre porque el SNS está infrafinanciado», explicó Boi Ruiz ex consejero de Salud de Cataluña, que añadió que «el impacto presupuestario es lo que prima. Se produce una cierta arbitrariedad a la hora de analizar el problema».

Por su parte, Ignacio Para, presidente de la Fundación Bamberg, sostuvo que «las autonomías se quejan de que no se cuenta con ellas a la hora de incluir un nuevo medicamento, sobre todo cuando es de alto coste, lo que puede afectar de forma importante su presupuesto sanitario y por eso demandan que estas inclusiones vengan acompañadas de su financiación correspondiente por parte del Estado». Por otra parte, añadió que «las autonomías reclaman que, en tanto que ellas son las que tienen las competencias sanitarias, una vez aprobado el medicamento ellas son las que tienen que decir cómo aplicarlo. Esta situación nos ha llevado a una grave desigualdad en el acceso a medicamentos innovadores, situación que se agrava más al no ser finalista la financiación recibida del Estado y disponer cada comunidad a su antojo de la parte del presupuesto que asigna Sanidad, con variaciones que van del 21 al 40%».

Por todo ello, Para considera que «habría que avanzar más en soluciones para la financiación, la participación de las autonomías y su implicación en los acuerdos del Consejo Interterritorial y en la accesibilidad y equidad en todas ellas en los medicamentos innovadores».

Déficit estructural

Otra de las preocupaciones es el déficit que la innovación puede generar, tal y como planteó José Ramón Menéndez, director general de Gestión Económico-Financiera y de Infraestructuras del Servicio Madrileño de Salud, Sermas, que matizó que «el concepto de asistencia sanitaria y financiación son contradictorios en términos. La asistencia sanitaria va evolucionando y la financiación va muy por detrás, con lo cual los responsables que nos dedicamos a la gestión estamos teniendo mucha dificultad para poder conciliar estos dos ritmos. Hemos tenido un problema específico con la financiación de los nuevos fármacos que ha supuesto un impacto notable económico con un aumento del déficit». Algo que corroboró José Martínez Olmos, que hizo hincapié en que «la innovación hace temblar a los consejeros de salud en relación a los presupuestos, incluso cuando ésta produce una enorme ventaja desde el punto de vista clínico. Porque la insuficiencia presupuestaria es clara y evidente».

Además, el Grupo Socialista propone un cambio en el modelo de toma de decisiones y plantea que el Fondo de Cohesión «tenga una partida de 150 millones de euros para afrontar y hacer posible la innovación y evaluar continuamente si las previsiones, tanto de mejora de la calidad asistencial como del impacto económico, se van cumpliendo».

Para el senador del grupo Popular en la Comisión de Sanidad, Jesús Aguirre, «las zonas de ineficiencia del sistema sanitario, tal vez se producen porque los políticos toman decisiones sin tener en cuenta a los técnicos».

Economía y hacienda

Mario Mingo, ex presidente de la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados, resumió cómo «cualquier innovación es el ámbito de la esperanza para los pacientes, pero para los políticos y gestores supone complicaciones y dificultades», e hizo hincapié en la subordinación que existe de la Sanidad a otros criterios políticos.

Ante la pregunta, durante el debate, sobre la presencia del Ministerio de Economía y Hacienda en la Comisión de Precios de los medicamentos, Boi Ruiz sostuvo que «es bueno si sabemos hacer trascender que el medicamento y la Sanidad en general son algo más que un coste, pero en el sentido de integridad vertical, donde el Ministerio de Economía dicta qué debe hacer Sanidad, me preocupa. Es importante que Economía esté presente lo más posible en el Ministerio de Sanidad siempre y cuando éste último aproveche la oportunidad para hacer entender que trabajaríamos mejor con una mayor autonomía a la hora de flexibilizar los presupuestos. No se trata de pedir dinero, sino de decidir dónde lo ponemos».

Por su parte, Martínez Olmos concluyó que «la clave es que Sanidad debe liderar el debate desde el conocimiento, nadie va a saber más que nosotros de medicina de precisión».

Agustín Rivero

Ex director General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia

«En cinco años hemos introducido 210 innovaciones sin un aumento exagerado del coste en farmacia»

Establecer un precio es difícil. Hemos usado el sistema de acuerdo de techo máximo de gasto que ofrece al paciente la garantía de acceso. Requiere de transparencia, solidez y un registro de pacientes. Otra opción es introducir el medicamento con el precio del laboratorio como en Alemania y, pasado un año, se evalúa y se establece un nuevo precio. O también establecer un fondo específico para los innovadores. La mayoría se dirigen a enfermedades raras, por lo que la aprobación de Hacienda de establecer una determinada cantidad sería el primer paso para estos medicamentos. También se podría establecer, como en EE UU, un máximo de medicamentos innovadores. En España la propuesta sería no financiar medicamentos con un presupuesto mayor de 30.000 euros por paciente, 100.000 en el caso de las enfermedades raras.

En estos cinco años hemos introducido 210 innovaciones en el SNS sin un exagerado aumento del coste de la farmacia, por lo que las herramientas que hemos usado, aunque son mejorables, también han dado sus frutos.

Ignacio Para

Presidente de la Fundación Bamberg

«Cada hospital incluye los medicamentos según sus protocolos»

En las CC AA cada división de farmacia establece sus criterios y protocolos específicos para la administración de medicamentos a través de sus comisiones de farmacia, lo que supone diferencias entre unas y otras y nuevas barreras para los médicos y prescriptores.

Además, cada hospital tiene su comisión de farmacia que establece la inclusión de medicamentos según sus protocolos y esto debe ser objeto de debate.

También es importante el papel de las farmacias comunitarias en la dispensación de fármacos recetados y cuál es la razón de que, en los últimos años, muchos de estos fármacos hayan pasado a ser de dispensación hospitalaria, hay que preguntarse si eso es lo más adecuado.

Concha Marzo

Directora de relaciones institucionales de Novartis

«Medir resultados en salud es el futuro y debemos ir hacia la gestión basada en el valor»

Nos encontramos en un momento en el que la demanda de servicios asistenciales sigue creciendo, motivada principalmente por un incremento de la población que cada vez padece más enfermedades crónicas.

Por ello, debemos seguir trabajando para garantizar el acceso a la innovación de forma rápida y equitativa. Y ya existen iniciativas de éxito. Un claro ejemplo son los sistemas de gestión basados en valor. Medir y evaluar resultados en salud es el futuro.

Suecia y Alemania son, a nivel internacional países con un fuerte enfoque en esta línea. También a nivel nacional, en España tenemos iniciativas y existen ejemplos que avanzan hacia la gestión basada en el valor.