Ayuntamiento de Madrid

Batallas vencidas

Batallas vencidas
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Días convulsos de intensidad inenarrable en nuestro País. Cuando todo se cuestiona, cuando las Instituciones parecen tambalearse y cuando no vemos la luz al final del túnel, entristece saber que es necesario vencer batallas para defender a los madrileños de su Ayuntamiento, despreocupado de las problemáticas sociales reales aunque se presente ante la opinión pública como el artífice de una ciudad idílica. Tras sesudas y largas reflexiones, que han involucrado a muchos, han aprobado el Plan de la “Ciudad de los Cuidados” en este mes y su objeto no es otro que situar en el centro de las decisiones políticas la vida cotidiana de las personas, el cuidado de la vida desde la perspectiva del feminismo, la ecología social y la ética de los cuidados y no sigo porque da miedo. A ver si se enteran estos señores de Ahora Madrid, que solo piensan en su propia propaganda política y en sus luchas intestinas, que estamos en un momento de cambios intensos, que es necesario cambiar la cultura de lo social y que es necesaria la pluralidad no la intolerancia ni la imposición ideológica de la minoría a la que representan.

Afortunadamente han renunciado a los “microbarrios” diseñados por sus mentes pensantes este verano, parece ser que las soluciones habitacionales prefabricadas han quedado en el olvido. Unos días digo blanco, otros negro, según convenga. Pero para ganar esta batalla ha sido necesaria la intervención de los partidos de oposición unidos contra la gran idea, la “contestación ciudadana” y los medios de comunicación. Hemos logrado vencer por presión, del Pleno y de los ciudadanos, porque este Gobierno municipal pretendía seguir adelante con su construcción sin cumplir los acuerdos de Pleno, algo ya muy habitual en esta Casa desde que gobierna Ahora Madrid. Lo de vivir en democracia parece que no lo entiende “la plataforma de la participación ciudadana y el diálogo”.

Si hago hoy esta reflexión sobre la cantidad de “luchas” que tenemos con el Gobierno Carmena, es por expresar mi preocupación ante debates sobre temas que no deberían ser motivo de conflicto sino de consenso o al menos, de diálogo o consulta y porque el tema empieza a ser muy preocupante. En la Comisión Social del mes pasado la Concejal Marta Higueras Primera Teniente de Alcalde de la Capital del Reino, nada más y nada menos, explicó sin inmutarse que tiene derecho a equivocarse, realmente asombroso cuando hablamos de experimentar con la vida de personas, con madrileños de los cuales muchos están en situaciones difíciles y traumáticas, ante conflictos de derechos entre vecinos y familias vulnerables que, obviamente, no quieren vivir en un barracón prefabricado ni ser recluidos en un gueto, en un barrio destinado exclusivamente a personas marginadas por el resto de la sociedad.

Me consta que no es sencillo atajar determinados problemas sociales, la experiencia me lo ha demostrado a lo largo de los años pero al menos uno espera que surja “la voluntad política” de solucionarlos. Toda iniciativa para abordar la problemática de la vivienda es bien recibida por nuestro grupo municipal además de estudiada pero no pongamos sobre la mesa experiencias obsoletas y fracasadas en el pasado.

Esta semana, el apogeo de la incomprensión se ha producido en el Distrito madrileño de Tetuán, cuando al llevar una proposición para buscar una solución para el asentamiento temporal de personas de origen subsahariano situado bajo los arcos del acueducto de Amaniel la respuesta de Ahora Madrid ha sido que la culpa de los asentamientos la tiene el Gobierno del Estado, o sea, Rajoy y sus ministros. Hace falta valor para afirmar esto ante los afectados. Los vecinos, furiosos ante el despropósito de la Junta Municipal que lo que hacía era tirar balones fuera sin ningún reparo, produjeron un ligero alboroto que por supuesto fue acallado inmediatamente al grito de: “se acabó” por parte de Montserrat Galcerán, Concejal de Tetuán. Una vez más la intolerancia, la incomprensión y la falta de respeto al adversario y al ciudadano. Cuando les plantean asuntos que no quieren escuchar surgen la agresividad y el desprecio, una verdadera pena tener que estar batallando por cuestiones obvias. Por supuesto a una vecina que intentó hablar sobre la insostenible situación del barrio de Bellas Vistas en la zona conocida como el “Pequeño Caribe”, en la que vive, le inadmitieron la solicitud por ser reiterativa en sus peticiones, así tenemos que trabajar algunos, a pesar de todo seguiremos en ello.