Nacionalismo

Mentiras muy gordas

Mentiras muy gordas
Mentiras muy gordaslarazon

No suelo auto citarme a la hora de escribir artículos, pero hoy es inevitable. Para entender de lo que escribo, les ruego que antes se lean este otro artículo mío del año 2007.

A fecha de hoy, el Parador Nacional de El Roser sigue en obras, y se espera su inauguración en breve. Y se volverán a montar los mismos paripés de exaltación épico patriota de la guerra de Sucesión y sus homenajes a sus supuestos héroes y mártires...

Pues bien, la diputada aranesa de la CUP en el Parlamento catalán y la habitual cohorte de palmeros del independentismo, han decidido desempolvar mi escrito para llamarme negacionista, manipuladora, revisionista, que aporto panfletos parafascistas... En fin el rosario de siempre que pueden ustedes seguir hasta el aburrimiento en mi cuenta de Twitter. Eso sí, como ya he mencionado en alguna otra ocasión, insultos muchos, pero argumentos que contradigan los míos, ni uno. Porque de lo que se trata, como ya decía hace tantos años, es de que la verdad no te tumbe un buen mito de esos tan adorados y fetenes acerca de la guerra de Sucesión, no vaya a ser que se tenga que reconocer que se ha mentido y se miente de forma flagrante para justificar la secesión catalana. Porque que te pillen así, como pillaron a Nigel Farage con argumentos falsos para apoyar el Brexit, es bastante bochornoso, aunque aquí a alguno se le ha pillado con mentiras muy gordas y no sólo no se ha sonrojado, sino que pasa las vacaciones plácidamente en familia en La Cerdanya olvidando que una vez dijo aquello de “La Udef... ¿Qué coño es esto de la Udef?”

Por otra parte, el servilismo de según que historiadores es reconocido por ellos mismos, como por ejemplo el Sr. Jaume Sobrequés i Callicó que en el libro Història de Catalunya —Ed. Base 2013— afirma: “que el historiador, sirviendo a la verdad hasta donde sea posible, tiene un compromiso con su país, es algo que he asumido desde el día en que publiqué los primeros estudios sobre el pasado catalán”.

Ah, los mitos...qué bonitos y que inconsistentes. Pero cuidado con querer demostrar que son sólo eso, historias imaginarias, porque como sea un mito indepe, aquí, a la hoguera vas.