Podemos

La guerra de Podemos... contra Podemos

La guerra de Podemos... contra Podemos
La guerra de Podemos... contra Podemoslarazon

Por Luz Trujillo

Era sólo cuestión de tiempo que el partido-movimiento Podemos entrara en conflicto interno a causa del enfrentamiento de dos corrientes de opinión —que no de ideología— que ya no se molestan en disimular.

En marzo negaron la mayor cuando los “errejonistas” intentaron hacerse con la organización podemita en Madrid, aquí no pasa nada afirmaban; sin embargo, Pablo Iglesias, haciendo uso de la purga que aplican los marxistas en caso de estorbo o rebelión, descabezó al hombre de confianza de Iñigo Errejón, Sergio Pascual, número tres de Podemos. Esto desembocó en la dimisión de una parte del Consejo Ciudadano de Madrid, que no hizo más que aumentar las desavenencias entre los bandos. La formación en Madrid, desde entonces, está descompuesta y los decepcionantes resultados del 26-J, con la pérdida de casi doscientos mil votos, ha llevado a los morados a replantearse su estrategia política y su modelo organizativo, cuestiones que se debatirán en el recién convocado Congreso Regional del que saldrá un nuevo Consejo Ciudadano.

Poco han tardado los “errejonistas” en mover ficha presentando Proceso Adelante, una iniciativa política impulsada por Rita Maestre, portavoz del Ayuntamiento de Madrid, y la diputada nacional Tania Sánchez, la del: “No, punto. No voy a entrar en Podemos, punto”, con la que concurrirán al próximo Congreso Regional con el fin de optar a liderar la formación en Madrid.

Esto no ha sentado nada bien al secretario general de Podemos, quien se ha revuelto postulando a su afín Ramón Espinar —portavoz del grupo Unidos Podemos-En Comú-En Marea en el Senado— para anunciar una contraofensiva que se bata en duelo con las féminas podemitas, sabedor de que se está jugando su liderazgo supremo.

Iglesias apuesta por el maximalismo y quiere organizar la insurrección populista desde la ortodoxia marxista: “sólo puede haber un líder y ese soy yo”.

Por el contrario Errejón apuesta por el posibilismo —hegemonizar el partido pero minimizándolo en una parte de las CC.AA— y eso supone un choque de trenes entre ambos. La ortodoxia quiere seguir imponiéndose a la transversalidad en el partido de “las clases populares”.

Pero como no hay dos sin tres, sorpresivamente los anticapitalistas han entrado en escena con una iniciativa encabezada por Miguel Urbán. Las diferencias de Iñigo Errejón con Pablo Iglesias han acercado a este último a las posturas de los anticapitalistas retomando un discurso más duro y radical hacia sus oponentes políticos. Es mi conjetura basada en la experiencia de las luchas de poder en la política

¿Puede estar la mano de Pablo Iglesias detrás de esta nueva iniciativa? De ser así, la táctica dejaría fuera de juego a los “errejonistas” una vez más; habrá que esperar para ver como todos van moviendo sus fichas.