Carme Chacón, un ejemplo para todas

Se nos ha ido una gran mujer, de forma muy prematura e inesperada. Todavía nos duele, pero mantener viva su memoria nos da al menos un leve respiro. Como otras grandes, siempre va a estar presente. Somos muchas mujeres las que la tenemos como referente y trataremos de seguir su ejemplo.

Carme Chacón ha hecho historia. Fue la primera mujer en muchos puestos de responsabilidad, rompiendo techos de cristal. Como Vicepresidenta del Congreso de los Diputados y más tarde como Ministra de Defensa demostró que las mujeres desempeñan igual, o incluso mejor que muchos hombres, tareas que hasta hace bien poco nos estaban vetadas.

Carme aplicó la máxima de Eleanor Roosevelt que nos decía “Haz una cosa al día que te de miedo”, porque son las mujeres valientes dispuestas a asumir retos las que permiten que avancemos hacia esa igualdad real aún no conseguida. Para Carme no ha habido reto al que no le haya hecho frente desde el principio y con una posición firme y segura. Con determinación, trabajo, esfuerzo y una profunda rebeldía ante las injusticias, abordó situaciones difíciles.

Las mujeres aportamos una visión y modo de hacer diferente a los hombres, y por ende, complementario. De ahí la importancia de que en todos los ámbitos de la vida pública estemos implicadas mujeres, asumiendo responsabilidades y toma de decisiones.

En el ámbito de la Defensa, a medida que las actividades de mantenimiento de la paz han ido evolucionando hasta abarcar un enfoque humanitario más amplio, la mujer ha pasado a tener un protagonismo cada vez mayor en el sistema de mantenimiento de la paz.

Las mujeres se encuentran desplegadas en todas las esferas – policía, contingentes militares y personal civil – y han tenido un efecto positivo en las situaciones donde se llevan a cabo operaciones de mantenimiento de la paz. Las mujeres demostramos, una vez más que podemos desempeñar las mismas funciones que nuestros homólogos masculinos, con el mismo nivel de eficacia y en las mismas condiciones difíciles. Carme Chacón lo demostró e hizo historia.

Naciones Unidas nos dice que es imperiosamente necesario, desde el punto de vista operativo, contratar a personal femenino de mantenimiento de la paz. Porque como la propia Carme nos recordó muy recientemente Gioconda Belli dijo que “No hay nada más poderoso que una mujer, tiene más poder que el músculo. Tiene más poder que las armas. No hay nada más poderoso que una mujer, porque tiene detrás el poder de la Igualdad. Tiene detrás el poder de todas las mujeres”.

Las mujeres empoderadas sirven de inspiración al resto de mujeres y niñas, y esto es especialmente relevante en las sociedades dominadas por los hombres para que las mujeres puedan hacer valer sus propios derechos a partir de referentes.

Carme trabajó intensamente por avanzar en la igualdad, por construir una sociedad más justa en la que las mujeres no se vieran relegadas. Así nos educaron nuestras madres, mujeres libres y feministas. Nos enseñaron a no aceptar para ninguna mujer discriminaciones o techos de cristal.

Vamos a seguir ese legado y esa lucha, porque nos queda mucho para conseguir la igualdad real, y porque la sociedad, España y el mundo, necesita del liderazgo de las mujeres. Siguiendo el ejemplo de Carme, sin rendirnos. Nos quedan techos de cristal por romper.

El mundo reclama liderazgos fuertes e innovadores. Nuevos liderazgos del que las mujeres son el mejor exponente. Porque es la forma de revalorizar la aportación de las mujeres y de esa manera que gane la sociedad en su conjunto. Porque cuando las mujeres lideran y son las que toman las decisiones se trabaja y lucha de forma más eficaz para mejorar la vida de las personas.

Sin duda hubiese sido una gran Presidenta del Gobierno.