Los efectos terapéuticos de la escritura

Todos sabemos que escribir puede ayudarnos a liberar nuestras emociones. ¿Quién no ha escrito su diario en la infancia o adolescencia? Tal vez las mujeres seamos más propensas a esas actividades de instrospección, pero tampoco faltan hombres que conectan con su lado más íntimo, tratando de entender qué les ocurre, o simplemente anotando lo realizado durante ese día, semana o año...

Aunque la falta de constancia muchas veces nos lleva a abandonar esta actividad, a dejar de lado ese diario, bien porque ya no nos sentimos tan mal, porque algo emocionante ha pasado en nuestra vida, por falta de tiempo o simplemente porque nos hemos aburrido.

Hoy quiero hablarte de los beneficios que puedes obtener al poner por escrito tus emociones, los sucesos diarios, tus reflexiones, así como el poder de la escritura creativa, sin necesidad de ser un autor o escritor.

Lo más importante es darte el permiso y buscar un tiempo para ti a lo largo del día. Algunos expertos sugieren realizar este ejercicio a primera hora de la mañana; otros, antes de irte a dormir. En cualquier caso, la escritura es un medio muy recomendable para personas que desean conocerse más, conectar consigo mismos, descubrir qué es lo que de verdad quieren y también fijar metas y objetivos, algo que en coaching es esencial.

Al escribir, especialmente a mano, anclamos las ideas, las fijamos, les damos valor y su lugar de ser.

Si ahora estás pasando por un momento difícil o simplemente quieres poner orden a tus pensamientos, la escritura es una manera muy efectiva en este aspecto. Y lo mejor de todo: es gratis, no necesitas más que un cuaderno y un bolígrafo para hacerlo. Tampoco estás haciendo un examen, nadie te juzgará por tu forma de escribir o por tus errores ortográficos o gramaticales. Es un trabajo muy íntimo que te permite conectar con tu interior y te libera.

¿Qué objetivos y formatos existen en la escritura terapéutica?

1. Escribir para conocerte más

Como coach recomiendo con frecuencia a mis clientes ejercicios de autoconocimiento que consisten en escribir sobre ellos mismos.

Imagínate que estás en una etapa de tu vida en la que debes tomar una decisión importante, como puede ser reinventarte a nivel profesional, porque estás en paro o porque simplemente deseas cambiar de trabajo y quieres dedicarte a lo que te apasiona.

La mejora manera es escribir durante varios días aquellas actividades que te gustan, que realizas, lo que piensas acerca de cuestiones importantes de tu vida: qué talentos tienes, qué se te da bien, recordar lo que te gustaba hacer de pequeño, por qué decidiste estudiar tu carrera, qué valores hay detrás de tu trabajo y los estudios elegidos, etc.

De hecho, mi curso online MailCoaching para descubrir tu pasión y reinventarte profesionalmente está basado en realizar ejercicios mediante la escritura, respondiendo a preguntas retadoras que te abren la mente y te permiten crecer más allá de lo que conoces de ti.

2. Escribir para sanar un duelo

Otra función esencial de la escritura es la sanación. Cuando nos ha pasado algo grave, como la pérdida de un ser querido, una ruptura de pareja, cuando los hijos se van de casa o perdemos un trabajo, por poner algunos ejemplos, es necesario darnos tiempo para asimilar lo ocurrido, para entender qué ha pasado, reconciliarnos con la vida o con la situación en concreto.

Escribir un diario en el que expresar nuestras emociones, nuestro dolor, es una tarea muy beneficiosa para nuestra salud mental, ya que nos permitimos sentir durante esos momentos las emociones intensas asociadas al duelo y, sobre todo, no las guardamos dentro, las dejamos fluir y las liberamos.

3. Escribir un blog

Este hábito también puede resultar muy saludable. De hecho, abrí mi blog personal hace años un poco con esta intención. Un blog es un diario que escribes de forma pública. Puedes hacerlo desde el anonimato o de manera abierta.

Sea un diario privado o abierto a los demás, es una manera de dar sentido o visibilidad a aquello que vives, observas, sientes... con el afán de compartirlo con otros.

En mi caso, la necesidad de compartir lo que me sucede es muy importante. Así puedo recibir apoyos o respuestas de otras personas que me leen y tal vez estén pasando por algo parecido.

Recuerdo una charla que ofrecí de manera gratuita y no acudió nadie. Al compartirlo en mi blog, recibí muchos apoyos de personas que ni siquiera me conocían en persona. Y además me compartían que a ellos también les había pasado algo similar y se sentían muy identificados.

4. La escritura automática

Esta forma de escribir está siendo cada vez más popular. Incluso se llegan a realizar maratones o retos de un número determinado de días en los que te comprometes a escribir diariamente durante 20 minutos o alcanzando las 1.000 palabras, si escribes en un documento de Word, por poner algunos ejemplos.

En este caso se recomienda escribir sin pensar ni analizar lo escrito. Porque así dejamos salir ideas o pensamientos ocultos a través de frases sin sentido aparente, que en realidad delatan ciertos patrones de nuestro pensamiento, así como miedos, emociones reprimidas, creencias...

Aquello que más se repite puede indicarnos qué es lo que no expresamos en nuestra vida diaria, cuáles son nuestros mayores anhelos, preocupaciones... y es un buen comienzo para un posterior trabajo personal de autodescubrimiento como puede ser el coaching.

5. Escribir tu diario emocional

Uno de los ejercicios más poderosos que realicé en los últimos años ha sido un profundo diario emocional de dos semanas, en el que cada día anotaba determinadas emociones y sentimientos que había experimentado a lo largo del día.

Es una manera guiada de realizar un diario, ya que para cada emoción respondes siempre a las mismas preguntas en cuanto a eso que te ha pasado. Este profundo ejercicio sirve para analizar y entender mejor tus emociones, darte cuenta de qué emociones predominan en tu vida diaria y cómo las puedes utilizar a tu favor, gestionándolas a ellas en vez de que sean las emociones las que te controlen.

En mi curso MailCoaching y el próximo curso online de autocoaching, el diario emocional es uno de los ejercicios obligados, puesto que desbloquea nuestras emociones y nos enseña muchísimo sobre nuestro propio manejo emocional.

6. Escritura creativa para diseñar tu vida

Esta última forma de escribir es muy interesante y además es la que he ido aplicando durante más de 20 años de mi vida. Se trata de escribir aquello que te gustaría vivir con la intención de atraerlo a tu vida.

Muchas veces sentimos que nuestra vida no es como nos gustaría que fuera y eso hace que nos sintamos frustrados. ¿Pero qué ocurre cuando decidimos volcar en un papel nuestros anhelos, deseos y sueños? Que al darles forma, los estamos atrayendo a nuestra realidad.

Siempre cuento que la mayoría de historias que escribí durante más de 20 años se materializaron de alguna forma en mi vida actual.

Y eso ocurre por la llamada Ley de la Atracción, de la que tanto se habló en la pasada década a través del popular libro llamado “El secreto”. Ahora, la ciencia, a través de la física cuántica, se acerca cada vez más a esa idea. Y es que nuestra mente no distingue entre imaginar o revivir algo y vivirlo realmente.

¿Qué pasa si usamos a favor ese mecanismo de nuestra mente de creerse todo aquello que le decimos? ¿Y si además lo dejamos plasmado por escrito? Al describir determinadas emociones con intensidad, las estamos sintiendo como si fueran reales y así atraemos esas emociones a nuestra vida actual o futura.

De eso trata mi próximo curso de autocoaching, el curso online SelfCoaching, en el que a través de la escritura vas a poder diseñar una vida a tu medida. Te invito a que veas este precioso vídeo de inspiración que hemos preparado y que te apuntes a la lista del curso para ser de las primeras personas en recibir toda la información, así como tu descuento de lanzamiento.

Recuerda que tú ya tienes todo el potencial dentro de ti. Es hora de sacarlo fuera, ¿no crees?