Cataluña

Puigdemont abre una guerra con Aragonès por su regreso a España

El expresident rechaza formar parte de la negociación del actual líder de la Generalitat con el Gobierno

Carles Puigdemont.
Carles Puigdemont.STEPHANIE LECOCQAgencia EFE

La figura de Carles Puigdemont continúa teniendo mucho peso en la política española. A pesar de que, en el día a día aparece en un segundo plano, cualquier movimiento que haga va a tener mucho impacto. Y, en este sentido, se avecina una primavera de alto voltaje porque se prevé que su situación judicial en Europa se desbloquee y su aspiración es poder regresar a España libre habiendo vencido al Estado en un pleito europeo.

En cambio, Pere Aragonès prefiere desactivar ese escenario, que puede volverse en su contra porque significaría una victoria de JxCat y su vía estratégica de confrontación y debilitaría su presidencia y su vía negociada con el Estado. Por ello, el president apuesta por que su negociación con el Gobierno permita traerlo de vuelta sin mucho ruido ni con la etiqueta de “héroe” para el independentismo.

De hecho, Aragonès, en la conferencia que pronunció ayer, pidió a Sánchez que reactive la negociación de forma inmediata y puso sobre la mesa la vuelta de Puigdemont, algo que el expresident ha salido hoy de inmediato a rechazar, recrudeciendo la guerra que hay entre JxCat y Esquerra. “Con todo el respeto al president Aragonès, en mi artículo publicado el 14 de octubre de 2021 en el Punt Avui, pedía también respeto para la estrategia política del exilio, y hacía una interpelación muy directa y explícita”, ha señalado a través de las redes sociales, recordando que tiene una estrategia que busca volver a España libre tras un pleito judicial mientras que Aragonès apuesta por un regreso tras una negociación.

Las posibilidades que tiene Aragonès para buscar una salida negociada para Puigdemont son la reforma del Código Penal para rebajar las penas de sedición o un indulto anticipado del Gobierno. Sin embargo, llegados a este punto, ninguna satisface a Puigdemont: el expresident está a la espera de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea resuelva la cuestión prejudicial presentada por el magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena sobre la idoneidad de las euroórdenes. Si resuelve en su contra, el camino de la extradición a España estará más que allanado; en cambio, si resuelve a su favor, Puigdemont podría resistir en Bélgica, aunque quedaría a expensas de que el Tribunal General de la Unión Europea le devuelva la inmunidad para que pueda moverse sin ser detenido por nuestro país (al ser eurodiputado).

En todo caso, por si fuera poco, Puigdemont responderá a Aragonès este miércoles exponiendo su propia estrategia internacional con una conferencia en Bruselas.