Festival de Málaga

Paco León agranda su leyenda con el primer premio póstumo recibido en vida

El actor y director Paco León (i), tras recibir el Premio Eloy de la Iglesia de manos de su tío Paco (3-i)
El actor y director Paco León (i), tras recibir el Premio Eloy de la Iglesia de manos de su tío Paco (3-i)larazon

Una gala de homenaje a Paco León no podía ser una gala al uso, y la de esta noche en el Festival de Málaga no lo ha sido, porque hay que ser muy grande para recibir un premio póstumo en vida, como hoy ha conseguido el actor y director al ser distinguido con el Premio Eloy de la Iglesia. Presidiendo el escenario del Teatro Cervantes, un retrato de Paco León como el que suele honrar al finado en un funeral ya hacía presagiar que la gala no iba a ser como ninguna de las celebradas hasta ahora en las dieciocho ediciones del Festival malagueño.

Los presentadores, La Terremoto de Alcorcón y Canco Rodríguez, han sacado pronto de dudas al público: iban a entregar un premio póstumo a Paco León, al que han calificado como "verso suelto, raro y heterodoxo".

Tras un vídeo que recordaba algunos de sus trabajos, tanto en la interpretación como sus dos largometrajes en la dirección, los conductores de la gala han comenzado a enunciar las últimas voluntades del "fallecido": "que se baje el IVA cultural antes de que se muera otro actor"y que se abra una sucursal del chiringuito malagueño El Tintero "en cada provincia".

La siguiente voluntad era que salieran al escenario Yon González y su hermano, Aitor Luna, y que, literalmente, "se comieran la boca"mientras que la también actriz Manuela Velasco les tomaba una foto para subirla a la red social Instagram, y como a un difunto no se le puede decir que no, han cumplido con la voluntad.

También sobre el escenario, el director y guionista Joaquín Oristrell ha seguido el juego al asegurar que "se van los mejores y se quedan los peores", y Paco León "ha dejado una carrera por hacer", mientras que Ana Polvorosa ha recordado con nostalgia su trabajo juntos en "Aida".

Otro compañero de esa serie, Eduardo Casanova, ha rememorado cómo Paco León hablaba de que tenía "una familia de sangre, que es la que toca, y otra familia de saliva, que es la que se elige", y lo ha calificado como "un hermano mayor"que ha hecho de él "una mejor persona".

Pero no quedaban ahí las últimas voluntades, porque Paco León quería un homenaje de Belén López y ésta se lo ha ofrecido cantando, antes de que aparecieran en el escenario su madre, Carmina Barrios, y su hermana, María.

"Si me está viendo desde algún sitio mi Paco, estará acojonadito pensando a ver qué coño va a decir mi madre", ha afirmado Carmina cumpliendo con su papel.

María León le dijo hace diez años a su hermano que se quería ir a Madrid para bailar, pero él le replicó que era "muy vieja"para eso y le animó a que probara con la interpretación, porque él le pagaría el primer año de escuela. "Mi mayor fortuna es ser la hermana de Paco León", ha aseverado María.

La apoteosis final ha llegado con la última de las últimas voluntades: que su tío Paco Casaus le entregara el Premio Eloy de la Iglesia bailando "El lago de los cisnes"vestido con un tutú.

Dicho y hecho, y bajo los sones de la rumba "El muerto vivo", Paco León ha resucitado para subir al escenario a recoger el galardón, que le ha hecho recordar a todos sus maestros del Centro Andaluz de Teatro y dedicarlo a su mujer, que está "detrás de todas las grandes decisiones".

Sobre su relación con el Festival de Málaga, la ha calificado como "un idilio en toda regla", desde que con "Carmina o revienta"le pidió "salir y dijo que sí".

"Con 'Carmina y amén' había una francesa de Cannes que me hacía ojitos, pero yo me vine a Málaga", cuyo Festival cumple 18 años, por lo que "ya puede ir al bingo, conducir y casarse".

"Pido en matrimonio al Festival de Málaga, y prometo respetarlo y honrarlo en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida, hasta que la muerte nos separe", ha añadido Paco León.