«Rey Arturo»: Mucha estética y muy poca épica

La leyenda del rey Arturo fue fundamental para reafirmar el sueño de Charlie Hunnam de convertirse en actor. «Vi todas las películas una y otra vez cuando tenía seis o siete años. De hecho, tenía una Excalibur que tallé en madera para poder imitarlo», afirma. Así que no es de extrañar que meterse luego en la piel del monarca en un estudio ambientado como Londinium haya supuesto una de las experiencias más «extraordinarias» de su vida. El británico, conocido por su papel de motero en la serie «Sons of Anarchy», se reinventa en la nueva fantasía épica «Rey Arturo: La leyenda de Excalibur», en la que encarna al legendario soberano de Bretaña, y cuyo estreno en España es hoy. El malo malísimo, Vortigern, corre a cargo de Jude Law que forma parte de un reparto que además incluye a Astrid Bergès-Frisbey, Djimon Hounsou, Aidan Gillen o Eric Bana.

Pero teniendo en cuenta que el director de la cinta es Guy Ritchie nadie espera el realismo histórico que se ha podido ver en otras adaptaciones, como la versión de 2004 de Antoine Fuqua. Ritchie, que ya ha explorado anteriormente mitos y estandartes británicos con «Sherlock Homes» y «Operación U.N.C.L.E», vuelve a ofrecer esa mezcla canalla y elegante que ya se ha convertido en su sello de identidad. En la primera media hora ya no hay duda de quién es el director con la impresionante batalla con la que arranca la cinta y el «flashback» con el que se presenta al protagonista acelerando y ralentizando la cámara al antojo del controvertido cineasta.

Este modernismo a la hora de adaptar los clásicos le ha funcionado en anteriores ocasiones. Con «Sherlock Holmes», por ejemplo, se filmó una segunda parte y se habla de una tercera entrega. Sin embargo, en este caso, la clara búsqueda por iniciar una saga podría complicarse, ya que la película, que ha tenido un presupuesto de más de 100 millones de dólares sin contar los gastos de lanzamiento, ha divido a la crítica.

Demasiado delgado

Hunnam interpreta a un joven que queda huérfano después del asesinato de sus padres y se gana la vida peleando y robando en las calles del Londres romano, hasta que encuentra su poderosa espada y se ve obligado a reconocer su verdadero linaje y luchar por el legado de la corona. «Estaba emocionado por interpretar a este monarca tan moderno y joven con una historia accesible al público», aseguró el actor durante la presentación de la cinta en la capital británica. Lo cierto es que el actor no fue a priori la primera opción para Ritchie. «Estaba rodando la última temporada de ‘‘Sons of Anarchy’’, mi personaje tenía que parecer muy demacrado y perdí mucho peso y a Guy le parecía que estaba demasiado delgado para el papel», relata. Con todo, Hunnam reservó un billete de avión, se presentó en Londres y obligó al director a tomarse «al menos una taza de té» con él. La perseverancia le aseguró una prueba de casting y finalmente se hizo con el papel. «Te voy a decir lo mejor de Charlie: todo», apunta el director. «Trabajó muy duro y no se quejó ni una sola vez, aunque le pedimos que hiciese cosas muy difíciles. Es una persona cordial, amable, atenta y con un gran talento. Me gustó al principio del proceso, me fue gustando más cada día y al final lo adoraba», añade el cineasta que, por cierto, tiene su propio cameo al aparecer unos segundos como responsable de una posada. «No fue algo deliberado, la verdad. Los extras ya habían aparecido en otras escenas y necesitábamos para esa toma una cara nueva. En el último momento me puse yo», explica.

En la literatura europea existen una gran cantidad de interpretaciones y versiones de la leyenda del rey Arturo, considerado como el monarca ideal en tiempos de guerra y de paz, y ha sido una de las historias medievales que más se han visto en la gran pantalla. Pero, según Ritchie, en esta nueva adaptación, a diferencia de todas las que se han hecho hasta el momento, se reinventa al personaje y, en lugar de representarlo como un hombre «noble», se muestra a un chico callejero y astuto que pasa «de ser un niño a un adulto» y «de ladrón a rey». «A todos nos gusta el papel de chico duro y pícaro», apuntilla Hunnam.

La película, que fue grabada en diferentes localizaciones de Inglaterra, Gales y Escocia, gira en torno al mito de Excalibur, nombre de la misteriosa espada clavada en una roca de granito que otorgaba poderes extraordinarios y que solo podía ser extraída y dominada por un hombre digno de ser rey. «Es una historia de autoconfianza, que invita a luchar contra tus demonios y a reforzar la disposición a salir adelante y a hacer grandes cosas», explica el protagonista, que después de diez años viviendo en Estados Unidos, se encontró con el reto inesperado de actuar sin acento americano. «El gran desafío fue entender y tratar la historia con el respeto que se merece y ser fiel a su originalidad y al mismo tiempo combinarla con creatividad», puntualiza.

Ritchie se basó en la recopilación de romances ingleses y franceses inspirados en los cuentos del siglo VI, cuando el rey Arturo defendía la Gran Bretaña de los invasores sajones e intentaba reunificar todos los reinos de isla. Además, el director se aseguró que la película incorporase efectos visuales, música y otros elementos que la hacen más «divertida» e interesante para las nuevas generaciones, sin perder la esencia de la leyenda. Así,no faltaron los elementos de fantasía propios del relato original como magos y hechiceros, si bien las criaturas no son dragones, sino animales más modernos como elefantes y serpientes gigantes, que ayudan al monarca en su hazaña de recuperar el trono del que fue despojado injustamente por su tío.

Hunnam, que da vida en «Sons of Anarchy» al motorista Jax Teller, aseguró que le «encantó» este cambio de registro en su trayectoria, ya que aspira a trabajar en «una gran variedad» de géneros e incluso a dirigir su propia cinta.