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«The Frankenstein Complex»: De dioses y monstruos

«The Frankenstein Complex»: De dioses y monstruos
«The Frankenstein Complex»: De dioses y monstruoslarazon

Dirección y guión: Gilles Penso y Alexandre Poncet.

Intérpretes: Guillermo del Toro, Joe Dante, John Landis, Chritophe Gans.

Francia, 2015. 107 minutos. Documental

Cuando la muerte del VHS dio paso al nacimiento del DVD, no solo ganamos en calidad de imagen sino que se abrió la veda a la cultura del suplemento. No era suficiente disfrutar de la película en cuestión sin tener que ajustar el «tracking» y sin sufrir las arrugas de la cinta. La mayoría de ediciones presentaban los «extras», que muchas veces funcionan como contraplano de la propia película, son lo que hay detrás de ella, desmontan la ilusión de su proceso de producción. En ese sentido, «The Frankenstein Complex» funciona como un «extra» monumental, que reúne a la flor y nata de los creadores de efectos especiales

–Chris Walas, Steve Johnson y Phil Tippett, entre otros– para desentrañar los secretos de corte y confección de los monstruos más famosos del cine de los últimos cuarenta años, aprovechando la oportunidad para escribir una elegía polifónica dedicada a todos aquellos que prefieren la delicadeza del trabajo manual a las maravillas digitales (que a veces han dado al traste con obras maestras de los «animatronics» artesanos, por culpa de la impaciencia y la cicatería de los productores). Así las cosas, el documental es, indirectamente, una condensada historia de los efectos especiales contada por sus responsables, con la aparición estelar de algunos cineastas visionarios (Joe Dante, John Landis, Del Toro) que complementan la visión más técnica del asunto. Lo que les une a todos es, precisamente, el placer de creerse doctor Frankenstein al concebir su monstruo: ser modernos Prometeos, convertirse en Dios en cada proyecto, jugar a dados con el universo. Lógico que Penso y Poncet decidan privilegiar sus testimonios, e ilustrarlas con imágenes de los «making of» de su trabajo, aunque el resultado se resienta en exceso de la estructura televisiva de los documentales de cabezas parlantes y echemos de menos fragmentos generosos de las películas de las que hablan, probablemente por una cuestión de derechos que habría encarecido un proyecto solo apto para fans de los F/X.

LO MEJOR

El capítulo que está dedicado a «Aullidos» y «Un hombre lobo americano en Londres»

LO PEOR

Faltan imágenes de las películas que refresquen el trabajo de los responsables de efectos