Valencia

El Palau de les Arts suspende «Manon» por seguridad

Una transeúnte observa los desperfectos en la cubierta del recinto
Una transeúnte observa los desperfectos en la cubierta del recintolarazon

Plácido Domingo no inaugurará su año como director musical en Valencia, como estaba previsto. La dirección del Palau de Les Arts se ha visto obligada a suspender el siguiente título de su temporada operística, «Manon Lescaut», ante la imposibilidad de asegurar la seguridad del público asistente después de que se produjeran recientemente desprendimientos en las cubiertos del edificio. La directora artística del coliseo, Helga Schmidt, tomó la decisión el pasado lunes y así se lo comunicó al público y también a los miembros del elenco (Tamar Iveri, Olga Busuioc, Rafael Dávila, Mattia Olivieri y Maurizio Muraro, entre otros), que iban a comenzar hoy los ensayos en la capital del Turia. «El centro de artes valenciano se ha visto obligado a adoptar esta decisión por motivos de seguridad. El Palau de les Arts retomará su programación lírica y sinfónica cuando haya garantía total de seguridad para el acceso al público», aseguran sus responsables en un comunicado. Si el asunto se resuelve, Domingo volverá para proagonizar «Simon Boccanegra» a finales de marzo. Antes de que eso ocurra, el siguiente título programado es «La italiana en Argel», de Rossini, con dirección artística de Joan Font, de Comediants y con Erwin Schrott, Silvia Tro Santafé y Antonio Siragusa como protagonistsa.

Mientras tanto, la solución pasa por desmontar las partes de «trencadís»que están deterioradas para volver a recu- brirlas. La superficie que tendrá que cambiarse y el método para hacerlo lo tendrá que dictaminar el Instituto Tecnológico de la Construcción (Aidico), al que el Ejecutivo autonómico le ha solicitado un informe. Sus conclusiones se presentaránel mañana y poco después, el día ocho, se reunirá el Consejo de Administración de la Ciudad de las Artes y las Ciencias (Cacsa) para aprobar el plan de actuación.

Pleito con el arquitecto

El coste de las obras, al menos de la primera parte, lo asumirá el Ejecutivo autonómico, ya que es una cuestión de seguridad ciudadana. Así, además, se garantiza más celeridad en el proceso de reapertura de la ópera. El Gobierno valenciano ya no esperará a las conclusiones de los informes solicitados para emprender las acciones legales pertinentes para que sea el arquitec- to, Santiago Calatrava, o la UTE de empresas constructoras, Dragados y Acciona, quienes paguenlas facturas, teniendo en cuenta que reponer el «trencadís» será caro. «Salvo que alguno de ellos se declare voluntariamente responsable y se haga cargo de los años, habrá que establecer acciones judiciales», aseguran desde el Ejecutivo. Los problemas con la ópera de Valencia vienen de lejos. A principios de 2013 ya empe zaron a producirse los primeros abomba- mientos en la fachada, ya que el trencadís está sobre una superficie de metal y no de hormigón, por lo que se arruga con los cambios de temperatura. Para prevenir los desprendi mientos, el Consell valló las zonas afectadas y solicitó una investigación.