Trabajo

Gabriel Fauré entra en el paraíso

La Fundación Declausura lleva hoy su «Requiem» junto al Coro de la JMJ a la iglesia de San Andrés de Madrid

El Coro de la JMJ tendrá un papel preponderante en esta obra
El Coro de la JMJ tendrá un papel preponderante en esta obralarazon

La Fundación Declausura lleva hoy su «Requiem» junto al Coro de la JMJ a la iglesia de San Andrés de Madrid

Una fundación que ayuda a los monasterios de clausura y que nació con un objetivo muy claro: contar y difundir la vida contemplativa y sensibilizar sobre su situación. Así es como lo cuenta Alejandra Salinas, una mujer comprometida que decidió remangarse y poner en marcha Declausura, proyecto del que se siente realmente orgullosa. Con este motivo, la fundación ofrecerá hoy a las ocho de la tarde un concierto en la Iglesia de San Andrés de Madrid, justo al lado de la Plaza de la Cebada, en la que se podrá escuchar al coro de la JMJ interpretar la bellísima «Misa de Requiem» de Gabriel Fauré, compuesta entre 1887 y 1890, una pieza muy adecuada para estos días ya previos a la Semana Santa. La citada fundación, que funciona desde 2010, trabaja desde hace dos años.

«Lo que queremos es difundir con la mayor amplitud posible esta realidad silenciosa de la iglesia, la vida que existe detrás de los números y que se dedica al silencio y la oración. España es el país más importante en cuanto a vida contemplativa. No existe parangón en cuanto a vocaciones y monasterios. Y sobre los jóvenes también, hay muchos capaces de dejarlo todo para dedicarse a una vida diferente», explica la presidenta de Declausura. Al preguntarle por la cifra de monasterios nos responde que en nuestro país existen 800 y alrededor de 9.000 monjas y monjes. Es decir, explica, que lo que pretende a través de la institución es «cuidar esta joya y este pulmón».

La fundación de Salinas echa una mano en todo lo que sea menester, desde recomponer un tejado de un convento que se haya venido abajo a vender sus productos. Hay bastantes necesidades y muchas manos que se necesitan. Y gracias a conciertos como el de esta tarde «podemos contar todo lo que somos y explicar la manera en que nos pueden ayudar. Es una iniciativa pionera, pues es el primero que hacemos y nos gustaría que se convirtiera no en un hecho aislado, sino en algo que pudiéramos ofrecer con cierta frecuencia. Además, será gratuito», explica.

Declausura nace como iniciativa de la Fundación Summa Humanitate –que nació en marzo de 2006–, cuya misión es contribuir a la labor social y pastoral de la Iglesia, ayudando a mantener su presencia en la sociedad actual. Según se recoge en la página web, se trata de «una entidad sin ánimo de lucro creada por un grupo de laicos católicos comprometidos, independiente de cualquier congregación, instituto, movimiento, diócesis, empresa o administración pública. Nace con la finalidad de servir a la Iglesia y contribuir al sostenimiento y difusión de sus obras, de forma tal que se garantice su continuidad y se mantenga su carisma».

«Cuando nos acercábamos a los monasterios nos preguntábamos por lo que necesitaban. Y ellos nos decían una cosa muy concreta: que se les conociera y que se puedieran vender sus productos. Su realidad es bastante dura, porque viven en edificios muy valiosos, pero tiene que sufragar gastos elevados y no reciben ayudas. Tienen que ser autosostenibles. Nuestra labor es contar que existen y buscar todas las maneras posibles de canalizar sus productos, que son de lo más variado, desde alimentación, con recetas ancestrales como dulces o mermeladas, a artesanía», explica Salinas.