Arte, Cultura y Espectáculos

La Quinta de Mahler

La Razón
La RazónLa Razón

A finales de 2013 un grupo de «locos» decidieron alquilar un local en la calle Amnistía, junto al Teatro Real, y montar una tienda de discos que se abriese a otras iniciativas. En dos años y medio de existencia, ese espacio ha pasado de utopía a vibrante realidad. La combinación del modelo tradicional de tienda con la creación de un espacio acogedor de actividades musicales ha convertido a La Quinta en un referente de la música clásica y de la cultura en Madrid, un punto ineludible de encuentro entre artistas público. Decenas de figuras de primer nivel mundial (Christie, Nucci, Savall, Biondi, Beczala, etc.), así como talentos emergentes de todos los ámbitos culturales, han desfilado en un intenso programa de actividades, a través de las cuales La Quinta (LQM) ha pretendido poner su grano de arena en la dinamización de la vida cultural de la capital de España.

Ahora, da un paso adelante mediante la creación del Club de Amigos de LQM, una idea que muchos clientes y amigos han ido sugiriendo a lo largo de los últimos meses. Con él se pretende que todos aquellos que creen en la necesidad de una iniciativa cultural como la que LQM representa, se sientan aún más partícipes del proyecto, apoyando su continuidad y disfrutando al mismo tiempo de ventajas.

La primera de las iniciativas de este club vuela alto. Se trata de analizar, a lo largo de siete sesiones monográficas, la situación actual de la música clásica en España y en el mundo, desde la perspectiva de otras tantas figuras internacionales del máximo relieve, representante cada una de ellas de un ámbito específico de la práctica musical. Serán coloquios abiertos en los que cada ponente, acompañado de un periodista o crítico, y con la intervención directa del público inscrito, analizará y expondrá su visión sobre un apartado específico del universo de la música clásica. La relación de ponentes impresiona: Giancarlo del Monaco (20 abril) dará sus opiniones sobre a dónde conduce la tendencia a la «germanización» de la escena; Ruggero Raimondi (9 mayo) hablará sobre las relaciones entre música y cine recordando sus trabajos con Losey, Rossi, Zeffirelli o Zulawski; Miguel Angel Gómez Martínez (17 mayo) comparará las formas de dirigir en tiempos de Furtwängler con las actuales; Teresa Berganza (18 mayo) hará lo propio respecto a la vocalidad y recordará a Callas y Bartoli; Antón García Abril (23 mayo) opinará sobre lo que reúne y lo que le falta a la creación actual; Joan Matabosch (31 mayo) comparará la forma de gestionar los teatros en tiempos de Ghiringhelli o Pamias con los de Marañón y Juan Angel Vela del Campo (14 junio) comentará los problemas que padece la música en los medios de comunicación y lo que debe ser la crítica. Iniciativas así merecen proliferar y ser apoyadas.