Rosalía, cantaora: «Cada uno tiene que explicar este arte desde sí mismo»

Es la nueva sensación: las respuestas están en su disco «Los Ángeles» y en una intensa gira

Acaba de publicar el disco «Los Ángeles» y la respuesta de la crítica ha sido unánime: Rosalía es el fenómeno flamenco del año. Con sólo 23 años, esta paya catalana no le teme ni a la tradición ni a los tópicos. Presenta su disco en festivales «indies» como el Primavera Sound (3 de junio), el Atlantic Fest (39) y el Vida Festival (1 de julio). La gira nacional e internacional siguiente ya tiene 26 fechas.

–¿Por qué cree que existe entre las nuevas generaciones tanto rechazo o indiferencia hacia el flamenco?

–De hecho, creo totalmente lo contrario. La gente joven actualmente está escuchando mucho flamenco y me entusiasma que mi generación se sienta conectada a nuestras raíces y nuestro folclore.

–¿Piensa que un nuevo público puede acercarse al flamenco gracias a usted?

–No sé si es gracias a mí, lo que es evidente es que se está creando una escena que antes no existía y que descontextualiza el flamenco de su lugar habitual. Concretamente en los directos de «Los Ángeles» veo a personas de todas las edades y eso me encanta. Desde público de 20 años hasta de 60 o más, y para mí es una suerte abarcar un rango de edades como éste teniendo en cuenta que en la base del concierto hay una hora y cuarto de cante flamenco. Es genial.

–¿Ofrecer una estética moderna como la suya (lejos de la bata de cola o la peineta) ayuda a atraer a los jóvenes a esta música?

–No me lo planteo. Intento que mi estética sea coherente con mis orígenes, mi edad y mis referencias. Eso es todo.

–¿Hacia dónde de ir este género? ¿Dónde se sitúa en el eterno debate entre tradición y ruptura?

–Nunca me atrevería a decir hacia dónde debe ir algo, los caminos se trazan por sí solos. Para mí lo importante es que cada uno sea lo más honesto posible con su propuesta y que trate de explicar el flamenco desde sí mismo, de la forma más personal posible. La tradición es necesaria y gracias a ella he aprendido, y sigo aprendiendo y la ruptura es la búsqueda de algo nuevo. Ambas posturas son interesantes y válidas por igual.

–Se ha formado mucho a nivel estudioso en el flamenco. ¿Cree que debería enseñarse más a los niños, que España vive un poco de espaldas a su música tradicional?

–Yo creo en la diversidad. Cuanta más música y más diversa se enseñe en las escuelas mejor, no solo flamenco. Lo mejor es dar herramientas y que luego los niños puedan elegir lo que prefieran.

–¿Qué palabra usaría para definir lo que siente o entiende por flamenco?

–No utilizaría palabras y mucho menos una sola, sería limitar lo que el flamenco significa para mí. Siento un amor profundo por esta música que me sirve como vía de expresión, no hay una sola palabra para esto.

–¿Qué le gustaría que se dijera de usted y su música el día de mañana?

–Hago música por una necesidad personal, porque no sería feliz haciendo otra cosa y soy incapaz de imaginar mi vida de otra forma. No espero una opinión concreta ni nada por el estilo en relación a mi música porque una vez la he hecho trato de desprenderme de ella. Yo hago esto porque me llena, lo que pase después del proceso creativo no depende de mí.