Danza

Víctor Ullate libera a Carmen del abanico

El coreógrafo levanta una adaptación de la ópera de Bizet en la que su protagonista «va al límite de la provocación», cuenta

Víctor Ullate libera a Carmen del abanico
Víctor Ullate libera a Carmen del abanicolarazon

El coreógrafo levanta una adaptación de la ópera de Bizet en la que su protagonista «va al límite de la provocación», cuenta

«Más transgresora y liberal», así presenta Víctor Ullate su «Carmen» –que estrena el día 30 en El Escorial, para seguir de gira por varias ciudades de España y representar en los Teatros del Canal el 31 de agosto –. Sin perder la esencia de la ópera de Bizet, el coreógrafo reconoce no haber querido hacer un ballet, «sino un espectáculo de una historia trillada».

Atrás queda la historia de la Sevilla del XIX en la que la protagonista conquista a Don José, éste deja a su anterior amor y a la milicia y se convierte en bandolero; hasta que descubre que Carmen ha comenzado una relación con un torero y decide asesinarla. Poco queda de aquello. «No hay ni un solo abanico. Queríamos hacer algo diferente», cuenta. Ahora, la cigarrera es una «modelo de alto standing», cuenta, por el día y prostituta por la noche. Sus dos amigas son travestis y José es el jefe de Policía. «La Carmen de ahora es más liberal, es una top model ninfómana que hace lo que le apetece y saca partido de ello –explica Ullate–. Va al límite de la provocación, pero disfruta de todo ello. Es el reflejo de la liberación del ser humano. Muchas mujeres quisieran hacer lo mismo y no se atreven por miedo a la reacción de la sociedad. Ella es la libertad en sí».

El director artístico de la Fundación Víctor Ullate, Eduardo Lao, apunta que la obra adquiere de esta forma «una perspectiva contemporánea que no va a dejar indiferente a nadie», pero que «Carmen» es «mucho más que música y que, en esta ocasión, los cuerpo, la estética y los movimientos se ponen al servicio de la belleza». Contexto en el que Ullate defiende a sus pupilos como artistas, que no bailarines: «Cada vez hay menos artistas en la danza. Se focaliza en la técnica, que es importante, pero también lo es que sean actores. Es fundamental y marca la diferencia».