Real Madrid Baloncesto

Y Rudy ayudó a Llull

El mejor partido de la temporada del alero permite al Real Madrid imponerse al Valencia en el arranque de la final. Él y Taylor, los escuderos más destacados del que nunca falla.

Rudy anota dos de sus 19 puntos pese a la defensa de Sastre
Rudy anota dos de sus 19 puntos pese a la defensa de Sastrelarazon

El mejor partido de la temporada del alero permite al Real Madrid imponerse al Valencia en el arranque de la final. Él y Taylor, los escuderos más destacados del que nunca falla.

Cuando Llull encuentra ayudas el Madrid es un equipo mucho más difícil de ganar. Así sucedió en el primer partido de la final. El Valencia sufrió al mejor Rudy en meses, al Reyes de toda la vida, a un desconocido Taylor, a una defensa muy exigente en los últimos minutos... a la versión más coral del Real Madrid y la victoria se quedó en el Palacio. Los de Laso golpearon primero a un rival que estuvo muy cerca de lograr el objetivo con el que llegaron a Real Madrid: llevarse uno de los dos primeros partidos.

Pablo Laso lleva semanas, muchas semanas, reclamando la aparición de jugadores que alivien la carga del 23 del Madrid. Hay partidos, como en la Final Four, en los que la mochila es demasiado pesada. Uno de los más requeridos era Rudy y su entrada en la final ofreció al Rudy más activo en ataque. Un par de triples, una bandeja... el jugador que un día fue y al que hace innumerables partidos que no se ve. Junto a Ayón fue el mejor escudero de Llull en la partida. Insuficiente para despegarse de un equipo que tiene el colectivo como el mayor de su avales. Un día puede ser Dubljevic, otro Oriola, otro San Emeterio... al principio de la final fue Sikma. El hijo de Jack Sikma, el legendario pívot de los Bucks de Milwaukee, fue una tortura para Randolph. Su hiperactividad impulsó al Valencia.

Después de un primer cuarto equilibrado, un parcial de 9-1 para el Madrid deparó las primeras diferencias significativas. Cuando el protagonismo recayó en los banquillos primero golpeó el de Laso. Reyes se hizo notar como siempre; Taylor, como nunca. El alero sueco, tantas veces desesperante, cuajó sus minutos más acertados de la temporada. Diez puntos sin error en el tiro para liderar el primer arreón (43-35). La aparición de Dulbjevic devolvió la igualdad. Fue momentáneo porque en los tres primeros minutos después del descanso el Madrid anotó otros tantos triples. Fue una nueva aparición de Rudy, la del jugador capaz de ser desequilibrante en ambos lados de la cancha. «Son sensaciones, son roles, pero quizá es cierto que he estado más agresivo de cara al aro», declaró a Movistar + al final del partido. Sumó ocho puntos más y devolvió el mando al Madrid, pero el Valencia no se iba a rendir.

Gracias al tiro exterior llegó incluso a ponerse por delante en el último cuarto (69-70, min 33). Los de Pedro Martínez llegaron a ofrecer un sobresaliente 10/15 en lanzamientos de tres, pero cuando la puntería desapareció, el equipo se vino abajo. De los últimos cinco lanzamientos de tres sólo anotaron uno y ésa fue la tumba para los valencianos. También ayudó que la intensidad defensiva del Madrid aumentó varios grados en los minutos finales. Eso y que Rudy dejó otra pincelada y Llull, el de siempre, anotó los cuatro últimos puntos de los suyos. «Hemos estado cerca, pero nos ha faltado algo», confesaba Pedro Martínez. Si al que no falla nunca, Llull, se le añaden escuderos, el Valencia lo tendrá muy complicado.