Suiza

Esquí low cost en los Alpes suizos

La estación de Saas-Fee
La estación de Saas-Feelarazon

En un esfuerzo por frenar la caída continua del número de esquiadores y luchar contra su imagen de destino turístico muy caro, las estaciones de Suiza, cuna de los deportes de invierno, tratan de reactivar el negocio lanzando abonos “low cost”.

“Hacía cuarenta años que teníamos las mismas tarifas, nos habíamos contentado esperando, pero ahora ya no podíamos esperar”, explica a la AFP Pierre Besson, director de los teleféricos de la estación Villars-Gryon-Diablerets, cerca de Lausana.

Besson es el impulsor de un nuevo producto, el “Magic Pass”, un abono a precio de saldo que ha sido un éxito en Suiza antes de la apertura de esta temporada de invierno.

El “Magic”, como él lo llama, es un pase de temporada que permite esquiar en 25 estaciones de esquí suizas por la mitad de precio, según las estaciones, e incluso por la tercera parte. Una oferta destinada a que los suizos vuelvan a esquiar.

A la venta desde la pasada primavera (boreal) por un precio de 359 francos suizos (307 euros) para los adultos, este abono atrajo a más de 80.000 personas y asegura ya a las estaciones tener, antes incluso de que comience la temporada, un “43% de ingresos”, explicó Besson, que dirige la cooperativa de estaciones asociadas.

Otras iniciativas, como el “Top Ski Pass” que incluye conocidas estaciones, como Gstaad y Wengen, o la “Wintercard” de la estación Saas Fee, tienden también a reducir drásticamente los precios de los telesillas.

“Hay una pequeña revolución en lo que se refiere a los abonos”, confirma a la AFP Véronique Kanel, portavoz de la Oficina de Turismo de Suiza.

Estas novedades, que hacen de esta temporada “el primer invierno de esquí low cost” en Suiza, según el gran diario francófono Le Temps, se explican por la crisis que atraviesa el esquí en este país conocido por haber inventado los deportes de invierno en 1864, en Saint Moritz.

Durante la estación 2016-2017, las estaciones locales registraron 21,2 millones de esquiadores, el total más bajo desde hace 25 años, según los teleféricos suizos.

- “Todos contentos” -

“En una docena de años, el mercado suizo perdió un 25% de frecuentación de las estaciones”, insiste Laurent Vanat, autor de un informe anual sobre el mercado mundial de esquí.

Hay varios factores a tener en cuenta. “Los más importantes, son el envejecimiento de la población y el hecho de que la gente esquía menos: no sólo no se renueva la base de esquiadores, sino que los existentes vienen menos”, explicó Vanat a la AFP.

Además, el encarecimiento del franco suizo, especialmente desde que el Banco Nacional abandonó en 2015 el cambio mínimo frente al euro, jugó en contra de las estaciones suizas.

“Hace unos diez años, todas las estaciones alpinas estaban en los mismos precios. Sin aumentar sus tarifas (...) se encarecieron entre un 15% y un 20%”, según Vanat.

Pero con “Magic Pass” y las demás ofertas, esperan que esto cambie. “Hemos revolucionado un poco la situación”, se felicita Besson, dado el inicio de temporada.

“La actividad de la estación ya es muy buena: restaurantes de gran altura, tiendas de deportes, hoteleros, los actores de estos sectores están todos contentos”, afirma.

Y, según él, “la gente recupera el placer por la montaña porque tiene la sensación de no haber pagado demasiado”.

Entusiasta, Besson espera sin embargo el fin del invierno para cantar victoria. “Es una temporada de prueba”, reconoce.

Para Kanel, de la Oficina de Turismo suiza, “si hay una excelente temporada de invierno (...) será una señal muy positiva”, pero la “gran pregunta” es saber si el modelo permitirá financiar a largo plazo las altas inversiones que requiere el mantenimiento de las estaciones y de los teleféricos.

Según Vanat, Suiza debe intensificar los esfuerzos en otros aspectos aparte de los abonos, en particular en la relación calidad-precio del alojamiento, si quiere volver a seducir de manera duradera a los esquiadores, principalmente a los extranjeros.