Real Madrid

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El chiringuito de Pedrerol: Todo es posible... con Zidane

El entrenador francés demostró en Barcelona estar a la altura del cargo que ocupa. Ha conseguido que el Madrid recupere el orgullo perdido y vuelva a creer

El vestuario del Madrid quiso inmortalizar con esta foto su felicidad en el vestuario del Camp Nou
El vestuario del Madrid quiso inmortalizar con esta foto su felicidad en el vestuario del Camp Noularazon

El entrenador francés demostró en Barcelona estar a la altura del cargo que ocupa. Ha conseguido que el Madrid recupere el orgullo perdido y vuelva a creer.

Se dudaba de Zidane. Se decía que no había demostrado nada. Que no le había ganado a nadie. Que era una incógnita como entrenador. Pero en el Clásico tapó la boca a todos. Demostró con una lección magistral ante el Barça, planteando el partido a la perfección y dirigiendo desde la banda con maestría, que el Zizou entrenador puede estar a la altura del Zizou jugador. El francés salió doctorado del Camp Nou. Como decimos en la portadilla de deportes de este periódico, «ha nacido una estrella».

Humildad, diálogo y fútbol

El éxito de Zidane en estos tres meses dirigiendo al Madrid es el éxito de la discreción, de la humildad, del diálogo, de la mano izquierda, de poner al equipo por delante de su ego. Algo que Rafa Benítez nunca entendió. Zidane sabe que su suerte depende de sus futbolistas y su objetivo ha sido desde el primer día sacar lo mejor de cada uno de ellos. Les habla de tú a tú. Los mira a los ojos. Los entiende perfectamente, porque estuvo hace no mucho tiempo donde ellos están. Siempre tiene el gesto oportuno, encuentra las palabras correctas y da la palmadita en la espalda al jugador que más la necesita en el momento en el que más la necesita.

Palos y zanahorias

Pero no todo son buenas palabras. Sabe enfadarse cuando es necesario, como en Las Palmas. Y las zanahorias también las acompaña con palos si es necesario. Que les pregunten a James o Isco. A Zidane no le tembló el pulso para sentarlos durante todo el partido en el Camp Nou y apostar por Casemiro en el once titular o por Jesé y Lucas Vázquez en los dos cambios que hizo. Precisamente a Casemiro le mimó cuando era segundo de Ancelotti, como reveló el brasileño en la entrevista que concedió a «El Larguero» de la cadena SER. Es así como se construye un vestuario, como se ve en esta imagen, donde sonríen hasta los grandes castigados. La foto de la unidad. La que ha construido Zizou.

Un gran Real Madrid

Este Madrid quiere volver a lo más alto. En Barcelona dio el golpe que le hacía falta para creer. Zidane está demostrando que sabe manejar un grupo, pero en el Clásico también dejó muy claro que sabe dar órdenes desde la banda en la vorágine de un partido complicado. Es un gran entrenador. Su Madrid fue un Madrid valiente, comprometido, competitivo, vertical y sólido. Con diez jugadores, le pintó la cara a todo un Barça tras sobreponerse a la anulación de un gol legal de Bale y al tanto de Piqué. Superó uno por uno todos los obstáculos. Ha recuperado el orgullo que le pedíamos a su equipo. Ha recuperado al Madrid que pedía la gente. Ha confirmado que es el entrenador perfecto para el futuro del club. Lo saben los jugadores, lo saben en el club, lo sabe la afición y lo sabemos todos: ha nacido una estrella. Con Zidane, todo es posible.