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Pesadilla en París

El PSG deja casi sentenciada la eliminatoria tras pasar por encima del Barcelona, menos intenso, menos equipo y que pudo llevarse un castigo mayor. Sólo Neymar dio la cara en los azulgrana.

Di Maria celebra uno de sus goles
Di Maria celebra uno de sus goleslarazon

El PSG deja casi sentenciada la eliminatoria tras pasar por encima del Barcelona, menos intenso, menos equipo y que pudo llevarse un castigo mayor. Sólo Neymar dio la cara en los azulgrana.

Una apisonadora se llevó por delante al Barcelona ayer en París. El PSG y Unai Emery dejaron atrás todos sus complejos contra el equipo azulgrana para conquistar un fantástico botín para el partido de vuelta, un resultado casi definitivo, a la espera de un milagro, de que la inspiración de Messi (perdido ayer), Iniesta o Neymar se conjuguen con el verbo ordenar y de la combinación salga un equipo. Ayer, el único que pudo presumir de actuar como tal fue el conjunto local, decidido desde el comienzo y con un plan que ejecutó a la perfección. La primera parte era atosigar al rival. Durante su carrera, Emery le ha planteado muchos partidos al Barça y casi siempre ha salido escaldado. Pero el entrenador español, táctico y estudioso, se ha dado cuenta de que este Barcelona sufre cuando le presionan arriba. Y allí se fue para firmar unos primeros 20 minutos plenos de intensidad e intención. Robaban balones, atacaban, amenazaban y sólo Ter Stegen les negó el gol, sobre todo en un paradón que le hizo a Matuidi. El Barcelona vivía de las carreras de Neymar, el único activado, mientras el centro del campo hacía aguas y Messi y Suárez no estaban. Un problema con la bota del brasileño le tuvo unos minutos desconectado y justo en ese momento marcó el PSG, en una falta que Umtiti hizo a Draxler al borde del área. El alemán fue un tormento por la izquierda mientras Rabiot, Verratti y Matuidi, con criterio y calidad, mandaban un poco más atrás. El tiro libre lo ejecutó Di María y allí estaba el 1-0 y la primera parte del plan cumplida.

Tocaba entonces descanso «activo». Encontró el Barcelona por fin la pelota, pero de forma ficticia. Su rival le dejó hacer para cazarlo a la contra. Ahí estaba la continuación del guión ideado por Emery. Con los futbolistas que tiene, disfrutó de alguna opción el Barça, sobre todo en un mano a mano de André Gomes tras la enésima arrancada de Neymar, pero siempre se le vio incómodo, sin profundidad, fuera de sitio. Un desastre que no mejoró. Tenía la posesión pero no mandaba, mientras el PSG se lanzaba en manada hacia arriba. Algo falló en la presión del Barça después de pérdida. Desordenado, la rompían Verratti y Rabiot, con trato exquisito de balón, y lanzaban a correr a Draxler y Cavani. Ter Stegen volvió a parar al alemán una vez, pero la segunda fue demasiado. Descompensado el Barça arriba y abajo, pues hizo mal el fuera de juego, con Piqué descolgado, llegó el 2-0, y gracias... La acción se produjo tras una pérdida de Messi. Una de muchas.

Ni hubo soluciones en el césped ni tampoco en el banquillo. La batalla del centro del campo estaba perdida, pero el tridente es intocable. Parecía que cada equipo jugaba a una velocidad: la de la luz el PSG y la de paseo el Barcelona. Volvió a la presión el cuadro local y otra vez las pérdidas y la tortura en el visitante. Lo que parecía tan difícil para el conjunto español, era pan comido para el francés. En una jugada iniciada en el portero llegó el tercero. Rabiot a Matuidi, una pared, la presión a destiempo y las líneas del Barça, destruidas. La pelota llegó a Di María, que remató de cine. Fue Ney quien se equivocó después, también en la presión, como origen del cuarto. Meunier le sorteó, ¿y dónde estaba el resto del equipo? Ni Iniesta ni Busquets llegaron. Estaban lejísimos. El defensa avanzó y cedió a Cavani el cuarto. El arreón final del Barça sólo sirvió para encontrarse una vez con el poste. No mereció el gol. El PSG se hizo mayor y le dio una lección mientras Unai Emery se desquitó a lo grande de todas las derrotas sufridas con anterioridad.

- Ficha técnica:

4 - París SG: Trapp; Meunier, Kimpembe, Marquinhos, Kurzawa; Matuidi, Verratti (Nkunku, m.70), Rabiot; Di María (Lucas, m.61), Cavani, Draxler (Pastore, m.86)

0 - Barcelona: Ter Stegen; Sergi Roberto, Piqué, Umtiti, Alba; André Gomes (Rafinha, m.58), Busquets, Iniesta (Rakitic, m.72); Messi, Suárez, Neymar

Goles: 1-0, m.18: Di María; 2-0, m.40: Draxler; 3-0, m.55: Di María; 4-0, m.71: Cavani

Árbitro: Szymon Marciniak (POL), amonestó al local Rabiot y a los visitantes André Gomes, Busquets y Rafinha.

Incidencias: Encuentro de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones disputado en el Parque de los Príncipes de París ante unos 60.000 espectadores.