Sevilla F.C.

Berizzo padece cáncer de próstata

El entrenador del Sevilla tiene que decir ahora qué tratamiento seguirá

El entrenador del Sevilla FC, Eduardo Berizzo, durante la rueda de prensa de anoche
El entrenador del Sevilla FC, Eduardo Berizzo, durante la rueda de prensa de anochelarazon

El entrenador del Sevilla, el argentino Eduardo Berizzo, padece un cáncer de próstata que se le ha detectado recientemente y será el técnico el que deberá decidir sobre su tratamiento

Anteanoche, las emociones en el Sánchez Pizjuán no concluyeron con el gol de Pizarro que, sobre la hora, sellaba la remontada épica del Sevilla contra el Liverpool. Entrada la madrugada del miércoles, diversos responsables del club hispalense confirmaban, con el ruego a los presentes de no publicar nada hasta las nueve de la mañana, el rumor que se había desatado en la zona mixta: Eduardo Berizzo padece un cáncer de próstata. Algún desaprensivo no atendió la petición, que era un deseo expreso del técnico argentino, e Internet hizo el resto con su proverbial efecto multiplicador. El periodismo es incorregible.

El caso es que, justo a la hora convenida, la web oficial del Sevilla informaba en un escueto comunicado que Berizzo sufre un «adenocarcinoma de próstata» que, pese a su gravedad, trastocaría lo menos posible el día a día del plantel. «No contemplamos otro escenario que la continuidad del entrenador», zanjaba el presidente Castro a media mañana. Tal y como estaba previsto, el Sevilla se entrenó a las once de la mañana a las órdenes de un Berizzo que era, aparentemente, el menos afectado por una noticia que conoció hace un par de semanas y que comunicó a sus jugadores el pasado domingo.

El parte médico del Sevilla afirma que inminentes pruebas aconsejarán qué tratamiento seguir, aunque entre bambalinas se da por hecho que Berizzo se someterá a una cirugía para extirpar el tumor. Fuentes médicas consultadas por LA RAZÓN aseguran que, dada la juventud del paciente, 48 años, lo más probable es que su enfermedad tenga un componente genético y haya sido detectada, por tanto, de forma precoz. «Sin entrar a valorar este caso concreto, sí se puede decir que las operaciones en estos casos tienen un alto porcentaje de éxito y que estas dolencias también se pueden combatir muy bien con tratamientos más conservadores», apunta un eminente urólogo.

La enfermedad de Berizzo ha desatado una ola de solidaridad en el mundo del fútbol, empezando por sus propios futbolistas, que publicaron un comunicado en el que aseguraban que su jefe «tiene huevos (sic) de sobra para superar esta situación». A las etiquetas #aguanteToto y #fuerzaBerizzo se adhirieron multitud de clubes españoles y extranjeros, singularmente el Liverpool, adversario de la víspera, y el Real Betis, eterno rival, que también se manifestó a través de su entrenador, Quique Setién, o de su capitán, Joaquín. Especialmente emotivos fueron el mensaje de Yeray, jugador del Athletic en trance de superar un cáncer de testículos, o la inmediata disposición a prestar ayuda de los servicios médicos del Barcelona, que han lidiado con experiencias similares en los casos de Tito Vilanova y Eric Abidal.

El futuro inmediato de Berizzo, que hoy ha dado descanso a su plantilla, es preparar con normalidad el partido del domingo en Villarreal, que dirigirá desde el banquillo. La semana próxima decidirá el tratamiento a seguir. Si se decanta por el quirófano, podría estar de vuelta en el tajo en los primeros días de 2018.