España se queda sin referencias

A la lesión de Iniesta se suma ahora la de Sergio Ramos, sustituido por el madridista Nacho en la convocatoria de la Selección española.

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Vicente del Bosque es un hombre prudente, pero vistos los últimos resultados, empieza a parecer arriesgado que anuncie la lista de convocados para los partidos internacionales un viernes con una jornada de Liga por el medio. Cuatro de los veintitrés previstos se han «caído» de la lista anunciada la semana pasada. El último, Sergio Ramos. «Acabé fastidiado y dolorido el derbi. Vengo a que me vean», decía el capitán del Real Madrid a su llegada a la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. Para entonces ya sabía que iba a ser complicado que se quedara para disputar el partido del viernes ante Luxemburgo y el del lunes en Ucrania. Precipitó su recuperación para jugar el derbi, pero tuvieron que infiltrarlo en el hombro para que aguantara el dolor. «Soy como soy. Es una lesión que se recupera en cuatro semanas y yo llevaba dos y pico. Que cada uno lo valore. No quiero medallas, pero las lesiones tienen un tiempo de recuperación. A veces nos lo saltamos para llegar a los partidos con más repercusión y eso es para valorarlo», añadía.

Después de que los médicos de la Selección lo examinaran y de hablar con ellos, regresó a casa dejando su lugar a Nacho, otro madridista. Del Bosque lo había incluido en la convocatoria, pero su marcha no ha sido una sorpresa para el seleccionador. «La impresión de los médicos es favorable, pero si no, buscaremos una solución», advertía. Vicente no quería perder a uno de los capitanes, especialmente después de haber tenido que renunciar a los lesionados Iniesta y Koke. La ausencia de Ramos se une a las de Carvajal, Íñigo Martínez y Bruno. El lateral del Madrid pelea por la titularidad con Juanfran. Los otros dos habían conseguido regresar a la Selección después de mucho tiempo. Pero ninguna ausencia es tan importante como la de Sergio. O como la de Iniesta.

Sin ellos dos, España pierde a dos de sus referencias, a dos de los jugadores que unen a esta Selección que Del Bosque intenta renovar con la que ganó el Mundial en 2010. Casillas, Cesc, Piqué, Busquets y Pedro son los únicos supervivientes de los 14 jugadores que disputaron la final contra Holanda.

De ésos, sólo Casillas y Cesc fueron titulares dos años antes en la final de la Eurocopa, aunque también jugaron Silva, desde el principio, y Cazorla en la segunda parte. Casillas es el único de los supervivientes de aquel equipo que encadenó dos Eurocopas y un Mundial. Ha sido el más discutido en los últimos años en su club, hasta que acabó encontrando en Oporto un lugar donde le dejaran jugar al fútbol tranquilo. El resto se han ido retirando del fútbol o sólo de la Selección –Puyol, Xavi, Xabi Alonso– o están lesionados, como Iniesta y Ramos. El tercer grupo es el que forman Villa y Torres, a los que Del Bosque ya no les encuentra hueco en la Roja. «Yo nunca he dejado la Selección porque me ilusiona como el primer día. Muchos de mis mejores recuerdos en un terreno de juego son en la Selección. Estoy orgulloso de haber participado en un periodo tan exitoso. Ahora el entrenador cuenta con otra gente, hace más de un año, pero me gustaría que el trabajo se reflejara volviendo», decía ayer en su presentación como nueva imagen de la firma de ropa Jack&Jones.

Es el momento de que crezcan otros futbolistas, jugadores como Piqué y Busquets, que deben heredar el brazalete de Casillas cuando el portero diga adiós a España. Al central azulgrana parece que le espera un recibimiento más amable en Logroño del que ha tenido en los últimos partidos de la Selección gracias a la iniciativa del diario «La Rioja» «Aplaudamos a Piqué». Con ellos, Iker ya no está tan solo.