Rescate a Grecia

El Gobierno asegura que España está «blindada» al contagio heleno

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro de Economía, Luis de Guindos, durante su comparecencia en el Palacio de la Moncloa tras la reunión de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro de Economía, Luis de Guindos, durante su comparecencia en el Palacio de la Moncloa tras la reunión de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos.larazon

MADRID- Contagio cero. Ése es el riesgo que el Gobierno calibró ayer para un posible efecto sistémico vinculado a la salida de Grecia de la eurozona. Una cepa que nadie quiere que brote, pero ante la que las principales economías europeas aseguraron estar vacunadas. La incertidumbre sólo perjudica a los griegos y provoca turbulencias controladas en los mercados ante las que el acorazado del Banco Central Europeo nada tiene que temer. Ante un previsible lunes negro en las bolsas europeas, el Ejecutivo, con el presidente del Gobierno a la cabeza, quiso trasladar un mensaje de tranquilidad. «España tiene un Gobierno serio», dijo Mariano Rajoy.

Horas antes, al término de la reunión de urgencia de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos convocada a primera hora de ayer para analizar el posible impacto de la crisis, el ministro de Economía ya había arrancado con el mismo mensaje de calma, dedicado especialmente a la bolsa española, que caía en la apertura casi un 5%. «Aún hay tiempo para el acuerdo con Grecia, hasta las doce de la noche del martes (hoy)», subrayó Luis de Guindos en una comparecencia en La Moncloa junto a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Saénz de Santamaría. De Guindos avanzaba el mensaje unívoco del Ejecutivo de que las reformas emprendidas por España son «el principal plan de contingencia de España». «Ahí está nuestro cortafuegos», expresó.

En el Gobierno se calibra que el impacto de la salida de Grecia de la eurozona, el peor escenario de todos los posibles, es asumible por la escasa relación económica entre ambos países y por la fortaleza de la recuperación económica. El respaldo del Banco Central Europeo es la otra clave que garantiza la estabilidad para todas las economías que permanezcan en el eurosistema. De hecho, el sentir general entre los grandes de la UE es que hace tiempo que ha dejado de ser rentable mantener económicamente a Grecia para sostener un proyecto político común con Atenas en la eurozona.

Por eso, el titular de Economía advirtió a Tsipras de que el pueblo griego será quien pague las consecuencias de un referéndum lleno de «incertidumbres», convocado con sólo 8 días de anticipación y sin saber todavía «a qué se dice no».

«Un corralito afectará básicamente a la gente corriente porque los ricos y poderosos ya se han llevado el dinero del país. Un corralito es una medida excepcional, extraordinaria y muy negativa con un impacto extremadamente recesivo sobre la economía griega y la población», puntualizó.

Asimismo, recalcó en varias ocasiones su confianza en que Grecia no abandone la zona euro y alertó de que esta posibilidad sería «la peor» para el país heleno. En cuanto al efecto sobre el resto de países pertenecientes a la eurozona, asumió que «todos viviríamos una mayor volatilidad, pero al final las incertidumbres se reconducirían».

De Guindos rechazó la interpretación de que la convocatoria del referéndum sea un «chantaje» aunque lamentó sus implicaciones ya que supone un modificación «sustancial» de los términos que negociaban todas las partes. Por ello, llamó al Ejecutivo heleno a analizar las consecuencias de sus decisiones y a recapacitar. «Cualquier Gobierno responsable lo haría», ha concluido.

Ante un eventual regreso a las negociaciones, el ministro descartó una quita de la deuda griega y reiteró que los préstamos de España a Grecia alcanzan los 26.000 millones de euros. Pese a todo, la «exposición de España» y de sus empresas y bancos es muy reducida. «Los 26.000 millones fueron solidaridad pura y dura. No tenemos casi exposición, ni comercial ni financiera. Lo que hemos hecho es ser solidarios con el pueblo griego», concluyó.

Por su parte, Saénz de Santamaría informó de que Rajoy ha mantenido contactos fluidos con el Gabinete económico así como con el líder de la oposición. La vicepresidenta suscribió las palabras del ministro de Economía al asegurar que las reformas y el crecimiento de los indicadores «nos permite afrontar con solvencia y seguridad una crisis de esta naturaleza».