Invertir 4.000 euros en un plan de pensiones puede ahorrar fiscalmente hasta 1.840 euros

Los planes de pensiones son un producto financiero que se pone de moda en los dos últimos meses del año tras permanecer en el olvido durante los diez restantes meses. Según datos de los Técnicos de Hacienda invertir 6.198 euros de media aprovechando los límites legales de estas aportaciones (no se puede ingresar más del 30% de los rendimientos del trabajo y actividades económica) puede suponer un ahorro fiscal superior a los 2.000 euros dependiendo de los ingresos del contribuyente y de la comunidad autónoma de residencia. La reforma fiscal aprobada por el Gobierno redujo de 10.000 euros a 8.000 la cantidades máximas que se pueden aportar los contribuyentes a sus planes de pensiones, pero permitió reducciones en la base imponible por las aportaciones realizadas por el cónyuge del contribuyente cuando éste perciba rendimientos del trabajo inferiores a 8.000 euros.

Las ventajas fiscales son mayores a media que el contribuyente gana más dinero. Las personas con mayores ingresos, dice Gestha, obtienen en su

declaración un retorno del 46% del importe invertido en el plan de pensiones. Así una persona que realice una aportación a su plan de pensiones de 4.000 euros antes de fin de año tendrá un ahorro fiscal de 780 euros si su renta es inferior a 12.000 euros anuales, de 980 euros si gana hasta 16.000 euros y de 1.840 si sus ingresos superan los 80.000 euros.