Huelga de estibadores

Los sindicatos aplazan la huelga tras el aval de la UE a la reforma

Tras la negativa del PSOE y el resto de grupos políticos a convalidar en el Congreso el real decreto ley aprobado el pasado viernes por el Gobierno

Contenedores en el puerto de Valencia.
Contenedores en el puerto de Valencia.larazon

Los sindicatos de estibadores han decidido suspender dos de las nueve jornadas de huelga que habían convocado, las fijadas para los días 6 y 8 de marzo, a la espera de comprobar si el próximo jueves el Congreso convalida finalmente o no la reforma del sector aprobada el pasado viernes por el Gobierno.

Los estibadores decidieron a última hora de la tarde de ayer desconvocar los dos primeros días de huelga en los puertos, que estaban previstos para los próximos días 6 y 8 de marzo. Mantienen sin embargo las otras siete jornadas de paros que habían convocado, y que comenzarán, si no hay nuevos cambios en el calendario, el viernes 10 de marzo. Los sindicatos de la estiba ganan así algo de tiempo para la negociación con la patronal Anesco. En cualquier caso y pese a la suspensión parcial de la huelga, en las últimas horas no se han producido avances significativos en las conversaciones entre los trabajadores y las empresas. Lo que ha sucedido para el cambio de postura es que parece aún más claro que el Gobierno carece de los apoyos parlamentarios necesarios para sacar adelante la reforma en el Congreso. De esta forma, los sindicatos aprovechan que el real decreto no podrá ser convalidado para evitar «incendiar» los puertos en protesta por una reforma que, al menos de momento y tal y como está planteada, no tendrá luz verde.

«La negativa del PSOE, además del resto de grupos políticos, a convalidar en el Congreso el decreto ley propuesto de manera unilateral por el ministro de Fomento, abre la posibilidad de una nueva mesa de negociación real para la consecución de una reforma del modelo de estiba de manera consensuada», asegura Coordinadora, el principal sindicato de la estiba. De hecho, reconoce que «no ha habido ningún avance en la negociación con las empresas» a pesar de las reuniones técnicas de los últimos días. Para los estibadores, «la normativa que propone el Gobierno desvanece cualquier posibilidad de acuerdo con las empresas».

En este sentido, el Ejecutivo recibió ayer desde Bruselas un fuerte espaldarazo a su plan para los puertos. La Comisión Europea envió una carta al ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, en la que señala que la reforma de la estiba aprobada por el Gobierno cumple las exigencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, al tiempo que reclama su rápida convalidación por el Congreso.

«Animo con gran entusiasmo a España a adoptar rápidamente todos los pasos que restan, en particular la convalidación del real decreto ley por el Parlamento español», dice la misiva. Además, recuerda la importancia de hacerlo cuanto antes, «a la vista de las multas diarias que corresponden por la falta de ejecución de la sentencia», cifradas en 134.000 euros y que ya suman más de 21 millones. «Una vez que se hayan adoptado estos pasos y siempre que la esencia del real decreto no haya sido alterada», se procederá al cierre del caso, dice la UE.

Fuentes de Fomento señalan que la reforma no se va a cambiar y recuerdan que se ha estado negociando dos años. Por su parte, la patronal pidió ayer al Gobierno un plan de ayudas públicas para el sector de la estiba, como condición indispensable para mantener el empleo. Anesco considera necesarias estas ayudas para mantener «la necesaria igualdad competitiva que deben tener las empresas actuales con los nuevos operadores» que entrarán al sector tras la reforma, previsiblemente con unos costes salariales muy inferiores a los actuales.