Barcelona

Los registradores se suman a las empresas y se van de Cataluña

Tres días antes del referéndum ilegal del 1 de octubre, 13 registradores catalanes pidieron el traslado fuera de la comunidad.

Extracto de la última convocatoria, en la que tres de las seis vacantes en Cataluña quedaron desiertas
Extracto de la última convocatoria, en la que tres de las seis vacantes en Cataluña quedaron desiertaslarazon

Tres días antes del referéndum ilegal del 1 de octubre, 13 registradores catalanes pidieron el traslado fuera de la comunidad.

Los registradores atraviesan tiempos convulsos en Cataluña. Al anuncio de la Generalitat en 2016 de prescindir de sus servicios para liquidar impuestos desde el pasado mes de septiembre se suman ahora la «fuga» de profesionales hacia otras comunidades autónomas, así como las dificultades para cubrir las vacantes que aparecen en Cataluña.

La inestabilidad política que atraviesa la región catalana a cuenta del desafío independentista está provocando que muchos registradores sigan el ejemplo de las empresas y hagan las maletas hacia otras partes de España. Cada pocos meses, el Ministerio de Justicia convoca un concurso público para cubrir las vacantes que van quedando en los distintos registros de la propiedad, mercantiles y de bienes muebles. A estas plazas optan todos los registradores que lo deseen, que pueden solicitar el traslado y conseguirlo, en función del número obtenido en la oposición y del número de solicitudes para cada puesto.

En la última convocatoria, con fecha del 28 de septiembre de 2017 (sólo tres días antes del referéndum ilegal) y en la que quedaron disponibles 80 plazas, el resultado del concurso fue significativamente distinto al de anteriores convocatorias. Hasta 13 registradores con plaza en Cataluña consiguieron el traslado fuera de la comunidad autónoma, un número inusitadamente alto en comparación con otros concursos. No obstante, es imposible conocer con exactitud el número de registradores catalanes que pidieron el traslado, pues Justicia sólo publica aquellos que consiguen la plaza, y no el total de los que piden el cambio de registro.

Los nuevos destinos solicitados por los registradores de Cataluña fueron Córdoba, Sevilla, Zaragoza, Alicante, Castellón, La Coruña, Madrid, Murcia y Navarra. Además, de las 80 plazas libres, seis correspondieron a registros de Cataluña. Sin embargo, tan sólo se lograron cubrir la mitad de las vacantes, pues tres de ellas quedaron desiertas al no presentarse ningún aspirante. Fue lo que sucedió en uno de los registros de Sabadell (Barcelona), así como en Tremp y Cervera, ambas localidades de Lérida. En la anterior convocatoria, celebrada el pasado mes de abril, Justicia convocó 59 plazas para los registros de toda España. En esa ocasión, únicamente un registrador de Cataluña pidió el traslado fuera de la comunidad. Además, no había ninguna vacante disponible en la región.

En la convocatoria de enero de este año sí que hubo cierta «fuga» de los registros de Cataluña, aunque por un motivo distinto. De las 39 plazas libres para toda España, cuatro fueron cubiertas por registradores de Cataluña que desempeñaban su actividad en oficinas liquidadoras, conscientes de que la Generalitat estaba a punto de asumir su actividad en la liquidación de impuestos y dejarles sin trabajo. Éste fue el caso de las oficinas liquidadoras de Vilafranca del Penedès y Martorell (Barcelona), Sant Feliu de Guíxols (Gerona) y Solsona (Lérida). Además, en esta convocatoria tampoco hubo ninguna vacante disponible en los registros de Cataluña.

La toma de control de la liquidación de impuestos como los de Sucesiones y Donaciones y Transmisiones Patrimoniales tras el acelerón de la Generalitat a la Agencia Tributaria Catalana puso en pie de guerra a los registradores, que incluso denunciaron a la Hacienda catalana por medio del decano del gremio en esa región.