España

S&P aplaude las reformas y sube un escalón la solvencia de España

La Razón
La RazónLa Razón

La agencia de calificación ha subido la nota de la deuda de España a un aprobado alto con perspectiva estable, como reflejo del sólido comportamiento de la economía, pero considera que un entorno político fragmentado tras el 24-D puede conducir a desviaciones presupuestarias y a una marcha atrás en la aplicación de políticas estructurales

Espaldarazo al Gobierno y a sus reformas en un momento clave, apenas tres meses antes de las elecciones generales. La agencia de calificación crediticia Standard & Poor’s (S&P) elevó ayer en un escalón el rating de solvencia crediticia de España, hasta «BBB+», una semana después de reunirse con el ministro de Economía, Luis de Guindos, en el «roadshow» que llevó a la delegación española de Londres a Nueva York. Además, la firma norteamericana alertó de una «incertidumbre significativa» ante los resultados de las elecciones generales y la posible «marcha atrás» en algunos de los cambios estructurales experimentados por nuestro país

La nota de España pasó así de «BBB» a «BBB+», un aprobado alto con perspectiva «estable», en una decisión que S&P justifica por «el comportamiento de la economía española durante los últimos cuatro años, que consideramos sólido y equilibrado» y por la positiva aportación futura de otros «motores del crecimiento» como «reformas laborales y estructurales, así como unas condiciones de financiación más favorables».

En opinión de la agencia, estos últimos tres factores serán los que lograrán que la «recuperación española sea más dinámica que la de sus pares», ya que otros como las «rebajas de impuestos, un precio del petróleo más bajo y un tipo de cambio más débil, es probable que se desvanezcan». Es decir, que S&P considera que estos tres estímulos tendrán un carácter estructural, y no coyuntural, y que este último efecto lo lograrán las reformas económicas.

Los frenos para la economía española serán, según S&P, «la todavía elevada deuda externa, el alto desempleo, el envejecimiento de la población y la menor inversión en educación, investigación y desarrollo en comparación con sus pares de la zona euro».

Así, S&P estima que nuestro país crecerá una media del «2,7% en el periodo 2015-2017, frente a nuestra estimación previa del 2,2%». Así, según estos pronósticos, el PIB aumentará un 3,2% este año y un 2,7% el que viene, lo que reducirá la tasa de paro (medida en términos de EPA) al 22,4% y al 20,7%, respectivamente, al final de los citados ejercicios.

Además, la agencia apunta que «la política monetaria del BCE ha tenido un impacto positivo sobre los costes de financiación exterior de España, lo que prevemos que continuará».

En lo que respecta al elevado apalancamiento público, la agencia norteamericana estima que «en el periodo 2015-2018, el gasto privado seguirá creciendo y el próximo Gobierno elegido adoptará nuevas medidas para reducir la alta deuda del sector público».

S&P cree, no obstante, que el Gobierno será incapaz de lograr el objetivo de déficit tanto en 2015 como en 2016, lastrado por las comunidades y por la Seguridad Social. Para este año, frente al objetivo del 4,2% del PIB, la agencia pronostica que será del 4,5%, mientras que en 2016, con un límite del 2,8%, la previsión es del 3,5%. Esto reflejará «un desempeño más débil de lo esperado de la Seguridad Social y la incapacidad de los gobiernos regionales para cumplir su ambicioso objetivo de déficit del 0,7% del PIB», opina.

De hecho, la agencia establece diferencias claras entre las diferentes administraciones públicas. Así, estima que este año el déficit de las comunidades autónomas será del «1,3% del PIB», mientras que el gobierno central «superará su objetivo de déficit del 2,9% gracias a unos sólidos ingresos».

La agencia considera que «Cataluña seguirá siendo parte de España» y vincula los riesgos a un «entorno político fragmentado después de las elecciones de este año». Según la agencia, ello «puede conducir a desviaciones presupuestarias y en la aplicación de políticas estructurales, lo que podría poner en riesgo el déficit a medio plazo de España y los objetivos de crecimiento económico».

El ministro de Economía, Luis de Guindos, dijo que la mejora del rAting de España por parte de S&P es «una señal de confianza» en la economía española y demuestra que «España puede crecer en torno al 4% en los próximos años».