Cataluña

El asesor fiscal de los Pujol elude responder si cobró dinero «desviado» a CDC

El asesor fiscal de los Pujol, Joan Anton Sánchez Carreté, ha eludido hoy responder en la comisión de investigación si cobró dinero de Casinos Cataluña, mientras que la empresaria Laura Cutillas ha negado haber pagado comisiones al primogénito del expresidente aunque sí a su exsuegro.

La comisión de investigación sobre el fraude y la evasión fiscal del Parlament ha proseguido hoy sus trabajos con las comparecencias de Sánchez Carreté y Cutillas, en una jornada en la que también estaban citados el director general de la Policía Nacional, Ignacio Cosidó, el del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz, y el comisario jefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF), Manuel Vázquez López, que han declinado comparecer.

El presidente de la comisión, el diputado de la CUP David Fernández, ha citado de nuevo para el 5 de mayo a los directores de la Policía y del CNI, así como al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, al de Interior, Jorge Fernández Díaz, y al jefe de gabinete del presidente del Gobierno, Jorge Moragas, que también rechazaron comparecer la pasada semana.

Sánchez Carreté ha evitado responder a la pregunta de si cobró dinero "desviado"a CDC a través de Casinos de Cataluña: "Yo nunca estuve llamado ni como testimonio en este procedimiento"judicial, se ha limitado a contestar.

Tampoco ha querido responder si el exsecretario general de la Presidencia Lluís Prenafeta estuvo "vinculado"a este caso o si él mismo le asesoró, y sobre su condena por la compra de dos centrales hidroeléctricas por parte de la Sociedad Eléctrica Pujals, que posteriormente fueron vendidas generando una plusvalía de 670 millones de pesetas.

Al respecto, el asesor fiscal del expresidente de la Generalitat se ha defendido aduciendo que la sentencia está "totalmente levantada", que hay un indulto aplicado en 2005 y que, incluso, ha recurrido dicha sentencia ante el Tribunal de Estrasburgo.

Sánchez-Carreté fue condenado como asesor fiscal a 2 años de prisión y a pagar 1,2 millones de euros por delito fiscal como consecuencia de la venta de Erkimia ocurrida en 1991 y, posteriormente, fue indultado por el Gobierno, aunque no ha querido aclarar su intervención en este caso.

Por su parte, la administradora de la empresa Focio, Laura Cutillas, ha negado en la comisión conocer a Jordi Pujol Ferrusola o haberle pagado comisiones ilegales por la venta de una finca, aunque sí que fue pagada a su ex suegro, Ramon Gironès, por valor del 1 % de la compra.

Laura Cutillas ha negado haber pagado comisiones al primogénito del expresidente de la Generalitat Jordi Pujol tras ser presionada su empresa (Focio) para que lo hiciera, a fin de poder vender una finca destinada a la construcción de viviendas protegidas.

"Nunca hemos pagado una comisión ilegal, ni por miedo ni por presiones, y nunca nos hemos reunido con Jordi Pujol Ferrusola, puesto que ni siquiera lo conocemos ni hemos sido presionados por él", ha asegurado esta empresaria que ha sido citada como testigo ante la Audiencia Nacional pero no ha sido imputada.

En cambio, Cutillas sí que ha admitido haber pagado una "comisión por intermediación"correspondiente al 1 % del valor de venta (30.050 euros) a Ramon Gironès, exsuegro de Jordi Pujol Ferrusola.

La finca en cuestión, de unos 15.400 metros cuadrados y situada en el barrio de Sant Feliu de L'Hospitalet, fue vendida dos veces, ha explicado, primero al Grupo Lar (compromiso de venta) y después a Copisa (contrato de compra-venta).

Según la compareciente, nunca recibió un trato de favor de la Generalitat o del Ayuntamiento de L'Hospitalet, y los terrenos calificados como de equipamientos sólo fueron recalificados después de la venta y no antes.

A Gironès le pagaron una comisión por "intermediación", ha explicado, "con muchas dudas y después de comprobar que era cierto que había intermediado en la venta a Copisa".

Sin embargo, ha reconocido, Gironès no había suscrito ningún contrato de intermediación, que es lo que resulta habitual cuando una agencia inmobiliaria ofrece sus servicios, y además "no había acreditado gestiones necesarias", motivo por el que la comisión se redujo del 3 al 1 por ciento.