El perito de Bankia asegura que el folleto de salida a bolsa «reflejaba su imagen fiel»

«Los estados financieros del Grupo BFA/Bankia deben reputarse como acordes con la imagen fiel de los sujetos económicos que representaban» en el folleto de salida a bolsa de la entidad. La anterior es la principal conclusión del informe elaborado por Rubén Manso Olivar, el ex inspector del Banco de España contratado por Bankia, que ayer fue entregado al juez Fernando Andreu. Con este segundo informe, la entidad se protegerá en el juicio por la OPV con el objetivo de minorar la responsabilidad patrimonial y las penas privativas de libertad que, en su caso, pudieran derivarse de la investigación.

El documento, de 261 páginas de extensión, rebate las alegaciones de los otros dos peritos judiciales del Banco de España, Víctor Sánchez y Antonio Busquets, que en diciembre de 2014 señalaron que las cifras con las que salió a bolsa Bankia no reflejaban el valor real de la entidad. Manso argumenta que la «muestra» utilizada por Sánchez y Busquets en su informe «es claramente insuficiente para extrapolar los resultados de la revisión al conjunto de la cartera crediticia» del banco.

Además, Manso señala que el análisis realizado por los dos peritos «no fue tan exhaustivo y completo como el que fue realizada por la inspección del Banco de España, la propia entidad y el auditor en años precedentes». El ex inspector del regulador también apunta que «a 31 de diciembre de 2010 y 31 de marzo de 2011 existía cobertura genérica suficiente para absorber el déficit de deterioro cuantificado en relación a la inversión crediticia en las cuentas anuales reformuladas de Bankia». De esta forma, Manso exime de culpabilidad tanto al regulador, presidido entonces por Miguel Ángel Fernández Ordóñez, como al propio banco, liderado entonces por el ex vicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato, hoy imputado en la causa.

A juicio de Manso, el análisis de la situación de la entidad en el folleto de la salida a bolsa no muestra «evidencias de errores» ni sobre la valoración de las carteras de crédito, ni la valoración de las participadas y la contabilización de los activos fiscales diferidos de la entidad. «Los estados financieros del Grupo BFA/Bankia analizados en este informe estaban auditados y gozaban, además, de un contraste adicional de calidad como es la supervisión de las autoridades públicas».

El ex inspector también refuerza su argumentación al señalar que la Autoridad Bancaria Europea (EBA) avaló que Bankia superaría «los requisitos de solvencia» de los escenarios más graves de deterioro económico. No obstante, argumenta que fue precisamente la recesión económica que sufrió España a partir de finales de 2011 la que provocó «que dicho deterioro –de la cartera crediticia de BFA/Bankia– no sólo se fuera incrementando, sino que dichos incrementos eran, además, crecientes». Manso alega que el deterioro del precio de la vivienda es el que acelera la crisis de la entidad financiera.

«El progresivo deterioro de las expectativas de beneficios o rendimientos de Bankia, sinergias y otros factores legales o económicos fueron los que, razonablemente, suscitarían la caída del valor de la participación e indirectamente de su valor razonable, que finalmente se estimó sobre la base de su valor teórico contable», apunta también el informe pericial aportado por Bankia al juez Andreu.

Las claves del informe

- Estados financieros

«Deben reputarse como acordes con la imagen fiel de los sujetos económicos que representaban, ya que no hay evidencia alguna que muestre que los mismos, durante el periodo analizado, contuvieran errores materiales ni contables en su formulación».

- Creación de Bankia

«De forma previa a la salida a bolsa de Bankia, las autoridades reconocían que el Grupo no presentaba debilidades que comprometieran su viabilidad».

- Reformulación de cuentas

«No puede considerarse un error contable un ajuste de valoración basado en nuevas estimaciones».

- Ajuste contable

«El deterioro del valor de los activos debe atribuirse al ejercicio 2011».