Elecciones generales

544 millones en un año: el coste de unas terceras elecciones

Cada cita con las urnas supone 130,2 millones de gasto, a lo que hay que sumar las subvenciones y los sueldos de diputados y senadores

Si el 1 de noviembre nadie logra ser investido, el día de Navidad habrá nueva cita con las urnas
Si el 1 de noviembre nadie logra ser investido, el día de Navidad habrá nueva cita con las urnaslarazon

Cada cita con las urnas supone 130,2 millones de gasto, a lo que hay que sumar las subvenciones y los sueldos de diputados y senadores

Más de 544 millones dilapidados en un año por la incapacidad de los partidos políticos para ponerse de acuerdo para formar gobierno. Sería el coste total que tendría para las arcas el que los ciudadanos tengan que volver a las urnas el 25 de diciembre por tercera vez para tratar de elegir a un presidente de Gobierno.

La suma comenzó con los comicios del 20 de diciembre de 2015, y los 130,2 millones destinados a su organización. Una cantidad en la que se incluyen desde los gastos logísticos a los de Correos o la difusión del escrutinio. Con los resultados de estas primeras elecciones, los partidos se embolsaron unos 42 millones de euros en concepto de subvenciones por los escaños y votos obtenidos. Hasta mayo estuvieron tratando de formar gobierno, tiempo en el que diputados y senadores se embolsaron, en concepto de sueldo, 14,1 millones hasta la disolución de las Cortes. En ese momento, hasta las segundas elecciones del 26-J, los sueldos los cobraron únicamente los miembros de las diputaciones permanentes de Congreso y Senado: un total de 1,3 millones.

La historia se repitió a partir del 26 de junio, con los cerca de 130 millones de organización de los segundos comicios. Y, de nuevo, las diferentes formaciones políticas se repartieron otros 42 millones de euros en subvenciones por los escaños y votos obtenidos en las elecciones.

Y, como en la anterior legislatura, los diputados y senadores comenzaron a percibir sus sueldos desde el 27 de junio. Si se cumplen los peores presagios y el 1 de noviembre ningún candidato ha logrado ser investido presidente, volverán a convocarse elecciones. Hasta ese día, sus señorías habrán recibido 11,4 millones en sueldos (menos que en la anterior al no haberse constituido aún las comisiones). Además, habrá que sumar los otros 1,3 millones de nóminas para los miembros de las diputaciones permanentes.

Por último, que los españoles tuvieran que acudir a un colegio electoral el día de Navidad volverá a suponer un gasto de 130 millones, además del consiguiente enfado y hartazgo por tener que presentarse por tercera vez en un año a votar para formar un gobierno que parece no querer llegar nunca.