Cádiz

Anulan la prisión para una cabo que le dijo «grito porque me sale del coño» a un superior

El alto tribunal indica que no hay delito, "sin prejuicio de su ventual consideración como falta disciplinaria militar"

El Supremo indica que no es una injuria, ni siquiera en su mínima versión de vejación injusta
El Supremo indica que no es una injuria, ni siquiera en su mínima versión de vejación injustalarazon

El Supremo ha absuelto del delito de injurias a una cabo del Ejército que, tras una discusión de tráfico, le espetó a un sargento, que le pidió moderación en su actitud por hallarse ante un superior.

El Supremo ha absuelto del delito de injurias a una cabo del Ejército que, tras una discusión de tráfico, le espetó a un sargento, que le pidió moderación en su actitud por hallarse ante un superior: "Grito porque me sale del coño".

El alto tribunal considera que la actuación de la suboficial no constituye un delito de injurias, como había sido calificada por el Tribunal Militar Central, y absuelve a la cabo del delito de insulto a un superior por el que había sido condenada a tres meses de prisión. Eso sí, precisa que lo hace "sin perjuicio de su eventual consideración como falta disciplinaria militar", es decir, considera que no hay delito pero posiblemente sí una falta disciplinaria.

El 28 de agosto de 2013, pasadas las 12 horas del mediodía, la cabo, que salía de prestar servicio de guardia, "se encontraba de paisano, junto a su coche intentando salir de la zona de aparcamiento de vehículos de la Base Naval de Rota (Cádiz), maniobra que resultaba imposible por impedirlo otros vehículos allí estacionados", cuenta la sentencia.

"Ante la imposibilidad de maniobrar, la cabo acudió a la Policía Naval para que avisaran a los dueños de los vehículos mal estacionados que le impedían salir, procediendo la Policía Naval a multar los vehículos y a avisar a sus propietarios", continúa. Los propietarios resultaron ser un sargento y un cabo primero quienes, al acercarse a la cabo para disculparse, se encontraron con que ésta "se encontraba bastante alterada por la espera"y, en "tono de voz alto", se quejó al sargento, quien "le recriminó su comportamiento, diciéndole que mostrara respeto, que se encontraba ante un superior jerárquico y que no gritara". Ante dicha recriminación, la cabo contestó: "Grito porque me sale del coño".

"Tal expresión no es conceptualmente injuria, ni siquiera en su mínima versión de vejación injusta, careciendo de entidad suficiente para ser calificada como delictiva", dice el Supremo.

Es, sencillamente, dice el Supremo, "una expresión malsonante, zafia y procaz, eventualmente acreedora, en su caso, de respuesta jurídica en sede disciplinaria".