Política

Pactos en Cataluña

Mas subraya que la nueva CDC no apoyará a Rajoy

El ex president, elegido líder del PDC con un 95,07% de los votos

M&M: Munté y Mas se dejaron fotografiar con una bolsa de chocolatinas para simbolizar su tándem presidencial
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El ex president, elegido líder del PDC con un 95,07% de los votos

La sombra del pacto del Majestic –aquel que firmaron PP y CiU en 1996– se pasea por el escenario político desde el pasado martes, cuando tuvo lugar la votación para la Mesa del Congreso. Hay quien quiso ver una reedición del Majestic porque CDC prestó el martes al PP algunos de sus votos para facilitar la elección de una vicepre- sidenta popular (Rosa María Romero), pero Artur Mas lo desmintió ayer con rotundidad. «Os puedo asegurar una cosa: ni la antigua Convergència ni el nuevo Partit Demòcrata Català (PDC) vamos a dar apoyo en ningún momento a Rajoy y al Partido Popular», zanjó. Con estas palabras trató de poner fin a toda especulación sobre la colaboración entre ambas fuerzas. Pero los periodistas insistieron y Mas dio otra garantía de que no hay margen para la investidura de Mariano Rajoy. «Ni por activa ni por pasiva. No vamos a apoyar a Rajoy», aseguró.

El ex presidente de la Generalitat realizó estas declaraciones poco antes de participar en la votación del PDC para escoger a los representantes de sus órganos de su dirección, último paso para completar la refundación de CDC. Mas demostró que mantiene el control de la nueva CDC obteniendo el 95,07 por ciento de los votos de sus bases en su candidatura a la presidencia del partido. «No va a ser una presidencia decorativa ni tampoco ejecutiva. Hay que encontrar un término medio», afirmó tras conocerse los resultados. Lo cierto es que el líder soberanista ha logrado controlar la práctica totalidad del proceso de refundación. Tan sólo ha tenido que sobrevivir a algún sobresalto (el del bautizo del nuevo partido, que no lleva el nombre que deseaba) y sacrificar a alguno de sus hombres (Jordi Turull). Por lo demás, todo ha salido a gusto de Mas. Su tándem presidencial junto a Neus Munté (vicepresidenta) se ha impuesto sin problemas y la nueva ejecutiva también se ha abierto paso sin dificultades. Marta Pascal, ex portavoz de CDC, se convirtió en coordinadora general, es decir, en la número 3, acompañada de David Bonvehí como mano derecha (coordinador organizativo) y de diez otros dirigentes, en su mayoría alcaldes del territorio catalán. Esta ejecutiva obtuvo el 87,7 por ciento de los votos, imponiéndose así a la candidatura alternativa de Ignasi Planes (12,27 por ciento). La única emoción la aportó la elección para la presidencia del consell nacional del PDC, muy disputada entre la presidenta de la Diputación de Barcelona, Mercè Conesa (ganadora con el 49,44 por ciento de los votos) y el conseller de Cultura, Santi Vila (42,04 por ciento). Muy lejos se quedó Joan Vila, un militante que logró el 8,52 por ciento. Los estatutos del PDC establecen una segunda vuelta al no alcanzar ningún candidato el 50 por ciento, pero Santi Vila renunció y, por tanto, Conesa dirigirá el consell nacional. La jornada concluyó con una participación de 5.430 personas (un 60 por ciento de los 8.000 asociados que integran el PDC). «La renovación va en serio. No es postureo», aseguró Mas, poniendo el foco en las nuevas caras.