Junqueras en la cárcel: «¡Sí, señor!»

Así se dirige el ex vicepresidente al personal de Estremera. Él y sus ex consejeros fueron recibidos a su llegada por el director del centro. A ellas les corearon en Meco el «Viva España».

«A Oriol Junqueras, ex vicepresidente del Govern, y a Joaquim Forn les recibió el director del Centro Penitenciario Madrid VII de Estremera junto con el jefe de servicio de día cuando ingresaron», aseguran fuentes consultadas por este periódico. El director también estuvo presente en la llegada de los otros cuatro internos que ingresaron después: Raúl Romeva, Josep Rull, Carles Mundó y Santi Vila, que salió ayer de prisión. «El director nunca había recibido a ningún preso, ni al más peligroso, ni tampoco a Granados. Lo más parecido fue con el productor de cine pornográfico Torbe. En esa ocasión acudió la subdirectora de seguridad en ingresos». El procedimiento para Junqueras y los ex consejeros fue el mismo que para el resto de presos. Se les tomaron las huellas, se les hizo la ficha y se les asignó una especie de NIF penitenciario que tendrán de por vida si vuelven a ingresar en prisión, salvo que sea en una catalana, dado que las competencias están transferidas.

Una vez se les explicó el funcionamiento de la cárcel se les dio a cada uno el kit de higiene básico: 4 rollos de papel higiénico, un vaso de plástico, un cepillo y pasta de dientes, cubiertos de plástico rojos, condones y lubricante. Y se les asignó una celda en ingresos, donde se fue comprobando en presencia de ellos que grifos, luz y timbre de aviso para una urgencia funcionaban. Además se les entregó un juego de sábanas y una manta roja. «Entraron tranquilos, más que tristes o cabizbajos diría que impactados. No dijeron nada especial y dado que no había más internos en el departamento nadie gritó», explicaron las mismas fuentes que añadieron que «su trato con el personal fue correcto, especialmente el de Junqueras, que se dirigió de usted, sí, señor y gracias».

Ayer se despertaron a las 08:00 para el recuento. Media hora después se procedió a la apertura de las celdas y a desayunar. Junqueras y los ex consejeros tomaron «un café con leche, galletas, un bollo de pan y mantequilla». Hoy tendrán un donut de panadería y el domingo: churros o suizos. Y si se quedan con hambre pueden repetir siempre y cuando quede.

Después de la hora de la comida seguían en ingresos donde estaban en el ala larga de la primera planta, divididos de dos en dos. Después fueron derivados en módulos «blandos» en los que se dan menos incidentes. Además les han asignado celdas próximas a las garitas de los funcionarios. Forn y Romeva fueron asignados a una celda del Módulo 3. Junqueras y Mundó han sido asignados a una celda del Módulo 7 y Turull y Rull a una del 4, ambos de respeto. Su celda es como la del resto. Disponen de 6 m2 de celda, que cuenta con una litera, un baño con un muro de un metro de alto para que no se vean en esos quehaceres, una repisa para poner la televisión que no tienen y baldas para guardar sus cosas, así como una ventana «a través de la cual pueden ver a otros internos, y seguro que alguno les habrá dicho algo».

239 euros por TV y vis a vis

Además, pueden salir al patio dos veces al día. «No disponen de televisión, si quieren tendrán que adquirirla en el economato por 239 euros. Es una televisión de 19-20 pulgadas. Si quieren un ventilador, unos 50 euros». Respecto a las comunicaciones, podrán disfrutar semanalmente de dos de 20 minutos separados por un cristal, aunque se suele juntar en una sola de 40 minutos a la semana. Además, podrán disfrutar de un vis a vis íntimo mensual y uno de convivencia cada tres meses.

A ellas, en cambio –Dolors Bassa y Meritxell Borrás– que están juntas en una celda del módulo de respeto, «las saludaron con banderas españolas en Meco», explicaron otras fuentes. Y dentro, «las internas les cantaron el ‘‘Viva España’’», añadieron otras fuentes.