Andalucía

Díaz da el salto para liderar el PSOE mientras pierde votos en Andalucía

El PSOE, dos años después de las últimas elecciones autonómicas en Andalucía, sería de nuevo el partido más votado pero tendría que pactar con Ciudadanos o incluso con Podemos para alcanzar la mayoría absoluta en el Parlamento regional

Díaz da el salto para liderar el PSOE mientras pierde votos en Andalucía
Díaz da el salto para liderar el PSOE mientras pierde votos en Andalucíalarazon

Encuesta NC Report / Andalucía. Los socialistas ganarían, aunque se dejan dos escaños en favor del PP. El 26 de marzo la presidenta de Andalucía presentará su candidatura con el objetivo de frenar a un Sánchez en alza

El PSOE andaluz ganaría de nuevo las elecciones en Andalucía cuando se cumplen casi dos años de los últimos comicios, los únicos a los que se ha presentado Susana Díaz y que se celebraron el 23 de marzo de 2015. Lo haría pese a dejarse más de 124.000 votos que sólo se transformarían en la pérdida de uno o dos escaños de los 47 actuales gracias a un descenso de la participación de casi cinco puntos. Los socialistas obtendrían 1.287.000 votos, el 34,9 por ciento del total de los sufragios, lo que les otorgaría el peor porcentaje de respaldo de su historia en unas elecciones autonómicas, por debajo del 35,4% obtenido en 2015.

El descenso del PSOE no sería aprovechado por el resto de formaciones políticas, ni las de centro derecha que representan el PP y Ciudadanos, ni aquellos que se sitúan a la izquierda de los socialistas, como Podemos e IU. Todos los partidos pierden votos, aunque el Partido Popular y Ciudadanos son los únicos que suben ligeramente en porcentaje de apoyos.

El PP ha recuperado terreno desde el descalabro que supuso para los populares los resultados de 2015 después de haber ganado sin mayoría absoluta en 2012 bajo el liderazgo de Javier Arenas. La formación que lidera Juanma Moreno –que será reelegido al frente del PP-A el próximo fin de semana en el congreso regional del partido– ya superó al PSOE en las últimas elecciones generales y la tendencia indica que recorta distancias con respecto a los socialistas pero de manera muy lenta. Así, el PP ganaría uno o dos escaños, los mismos que perdería el PSOE, y obtendría un 1,4 por ciento de sufragios.

Similar situación experimentan Podemos y Ciudadanos. El deterioro del primero es aprovechado por el segundo. El partido que lidera Teresa Rodríguez se dejaría casi 60.000 votos y un 0,4 por ciento de apoyos, pudiendo perder uno de sus 15 escaños actuales. La formación naranja que dirige Juan Marín ganaría casi medio punto del porcentaje de sufragios (0,4) y un escaño.

El partido peor parado sería IU, con casi 90.000 votos menos y uno o dos escaños menos, confirmando la peligrosa deriva hacia la irrelevancia del partido que gobernó con los socialistas en la anterior legislatura que comenzó con José Antonio Griñán como presidente y que concluyó de manera precipitada con elecciones anticipadas ya con Susana Díaz al frente.

Con estos datos, la gobernabilidad en Andalucía pasaría por un nuevo acuerdo del PSOE con Ciudadanos o incluso con Podemos. El Parlamento andaluz cuenta con 109 diputados, por lo que se necesitan 55 para dotar de estabilidad al Gobierno. En la horquilla más baja de la encuesta, PSOE y Cs se quedarán en 54, por lo que los socialistas tendrían que mirar hacia Podemos. La suma, en ese caso, sí saldría, aunque la interlocución entre Susana Díaz y Teresa Rodríguez no es la mejor. La posible marcha de la presidenta andaluza o incluso una posible derrota en las primarias del PSOE podría obligarle a un acercamiento a la formación morada, a la que sí ha permitido gobernar en algunos ayuntamientos, como es el caso de Cádiz.

El trabajo de NC Report para LA RAZÓN también ofrece algunas claves para entender la solidez del bipartidismo en Andalucía. El PP es el partido que en mayor grado fideliza a sus votantes y hasta el 86,9 por ciento de sus electores seguirían confiando en este partido. La fuerza del PSOE andaluz también es muy importante y el 80,5 por ciento mantiene su confianza intacta en el partido. Entre los electores de éste último apenas hay fugas de votantes y, en cualquier caso, el trasvase de apoyos no sería en beneficio de Podemos (2,2%) sino a favor del PP (2,6). Éste último partido vería como el 3,8% de sus votantes se iría a Cs, pero ganaría el 11,6% de electores de la formación naranja.

Pendientes de la reforma electoral

El acuerdo de investidura firmado entre el PSOE y Cs contempla la reforma de la ley electoral en Andalucía. De momento, ese compromiso se ha limitado a la creación de un grupo de trabajo en el Parlamento autonómico sin que hasta la fecha se haya alcanzado un acuerdo para cambiar un texto clave en la conformación de mayorías parlamentarias. La decisión de Díaz de concurrir a las primarias del PSOE también puede influir en los próximos meses e incluso los partidos de la oposición no descartan otro adelanto electoral.