España cambia de rumbo

Diez motivos para tener confianza en España

Las reformas comienzan a dar sus frutos y el país empieza a emitir señales positivas. El turismo, las exportaciones o la inversión extranjera, motivos para el optimismo

Diez motivos para tener confianza en España
Diez motivos para tener confianza en Españalarazon

MADRID- En las últimas semanas, los medios de comunicación e inversores extranjeros han comenzado a mostrar que su percepción sobre la situación económica de España es bien distinta de la que tenían no hace mucho tiempo. El país ha pasado de ser considerado el siguiente en la lista de rescatados a despertar el interés de los inversores y concitar un gran reconocimiento por sus reformas. Aunque queda mucha tarea por hacer y, como dicen los analistas, sería un error caer en la autocomplacencia, los cambios implementados en los últimos meses están empezando a cuajar, de forma que la economía española comienza a emitir señales positivas. A los buenos datos ya conocidos del turismo y las exportaciones se han sumado en los últimos meses otros no menos importantes, como el paulatino retorno de la inversión extranjera por mor de la recuperación de la confianza en España. Factores como la contención de los precios y de los salarios contribuirán, a medio plazo, a mejorar la competitividad de las compañías españolas, cuya creación volvió a tasas positivas en los últimos meses del pasado ejercicio. Todo este clima de confianza se está traslando también a la Bolsa, como demuestra el buen arranque de año que está teniendo el Ibex. Además, la prima de riesgo ha vuelto a niveles sostenibles.

El tercer mejor año del turismo

Se cumplió el pronóstico. En 2012, llegaron a España 57,9 millones de turistas, 1,2 millones más que en 2011. La primera industria nacional ha conseguido superar la crisis con nota, después de que en 2009 registrase las peores cifras de los últimos años: 52,2 millones de visitantes. Eran tiempos en los que no sólo la economía española estaba muy tocada sino también la de los principales países emisores de turistas: Reino Unido, Francia y Alemania. Paso a paso, el turismo vuelve a acercarse a las cifras récord que precedieron a la actual crisis económica. La cifra de 60 millones de turistas puede dejar de ser una utopía en un par de años si Europa no vuelve a la recesión económica. Pero si la cifra de turistas es importante, no lo es menos la de ingresos que genera esta actividad. El pasado año, los 57,9 millones de visitantes dejaron en España un total de 55.777 millones de euros, casi 3.000 millones más que en 2011.

Contención de salarios

En los convenios de 2012, el aumento salarial pactado fue del 1,31%. Esta contención salarial vino acompañada de un ligerísimo incremento de la jornada laboral, que ha pasado de 1.742 a 1.744 horas anuales. En 2007, el aumento salarial fue del 4,21%, según los datos de Empleo. Con la crisis, las negociaciones entre sindicatos y patronal se centraron en el mantenimiento del empleo a cambio de la aceptación de reducciones de salario.

El sistema financiero, saneado

Contar con un sistema financiero que preste dinero es fundamental para la buena marcha de cualquier economía. Después de la ayuda recibida desde Bruselas de 41.000 millones de euros, España ha sentado los cimientos para tener unas entidades financieras saneadas para que fluya el crédito. Incluso la OCDE reconoce que, ahora mismo, el sistema bancario alemán estaría en una situación más precaria.

La inversión extranjera vuelve

Entre enero y octubre de 2012, la crisis de la deuda se dejó sentir en los países periféricos. Prueba de ello es que el saldo de la cuenta financiera arrojó un déficit de 211.000 millones, lo que equivale a decir que esa cantidad es la que los inversores extranjeros sacaron de España. En los últimos meses, sofocado el incendio que elevó la prima de riesgo de España hasta los 640 puntos en julio, la confianza parece restaurada. En septiembre y octubre, hubo una entrada neta de capitales exteriores de 43.000 millones.

Los precios se han estabilizado

Tras la vertiginosa escalada que experimentaron en septiembre y octubre por el impacto de la subida del IVA, los precios comienzan a estabilizarse. En noviembre y diciembre el IPC subió por debajo del 3%, frente al 3,5% que registró en octubre. Su contención es fundamental para la recuperación económica, pues combinados con una contención de los costes salariales, mejorarán la competitividad de las compañías españolas, que podrán así incrementar sus exportaciones y crear con ello empleo.

El ibex recupera un 44,5% desde mínimos

El 24 de julio del año pasado será recordado como el peor día de España en los mercados desde que estalló la crisis económica. El Ibex 35 tocó suelo en los 5.956,3 puntos, el sector financiero hizo aguas en pleno rescate y la marca España sufrió un fuerte ataque por parte de los inversores. La reacción de Mario Draghi, presidente del BCE, cortó la hemorragia; los títulos españoles volvieron a registrar demanda y el selectivo ha registrado un fuerte aumento del 44,45% –hasta los 8.604 puntos– desde entonces.

Más de 5.000 sociedades mercantiles al mes

La recesión económica se ha convertido en los últimos años en una máquina de triturar puestos de trabajo y empresas. Pero la tendencia en este último caso ha comenzado a invertirse en los últimos meses. Entre agosto y noviembre del pasado 2012 se crearon, como mínimo, 5.000 compañías cada mes. El mejor mes fue noviembre, cuando nacieron 7.592, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

La prima cae 286 puntos básicos

El mismo día en el que el Ibex 35 tocó mínimos, la prima de riesgo de invertir en deuda española se disparó hasta su máximo histórico de 638,5 puntos básicos. El interés del bono a diez años escaló al 7,621% en el mercado al cierre de esa jornada negra en la que España estuvo al borde de su segundo rescate. Desde entonces, el diferencial de nuestro país con Alemania se ha reducido en 286 puntos (un 44,8%, hasta los 352,4 puntos), y el cupón de los títulos a diez años se han abaratado al 5,079% en el mercado secundario.

Aumento de la recaudación tributaria

El último buen dato que ha hecho público el Gobierno ha sido el de la recaudación tributaria. La entrada en vigor de la subida general del IVA, del 18 al 21%, ha jugado un papel decisivo para cumplir con lo presupuestado. En la primera mitad del año, los ingresos impositivos arrastraban un desfase de 3.000 millones, que ha podido ser corregido en los dos últimos meses. La Agencia Tributaria ha recaudado 168.000 millones, según los primeros datos provisionales. Los ingresos impositivos estuvieron siempre en el punto de mira de los inversores, que los consideraban demasiado optimistas, a pesar de que desde enero entró en vigor el gravamen temporal del IRPF.

Las exportaciones crecen un 4,2%

Es la estrella de la actividad económica en los últimos meses. Su contribución ha permitido que la caída del PIB haya sido más moderada en el conjunto del año. En octubre, último mes del que se tienen datos, la tasa de cobertura, es decir, el porcentaje de las importaciones que pueden pagarse con los ingresos procedentes de las ventas en el exterior, marcó un nuevo récord histórico al situarse en el 86,8%. La buena marcha de las exportaciones ha permitido reducir el déficit comercial en un 28,3% y situarlo en 28.056,4 millones frente a los 39.115 millones en el mismo periodo del año anterior. En los diez primeros meses del pasado año, las exportaciones españolas alcanzaron los 185.105 millones, un 4,2% más que un año antes. Las importaciones se han contenido un 1,6%, aunque por la dependencia del petróleo, representan valores muy elevados: 213.162 millones de euros.

Sectores como la alimentación, los bienes de equipo y los productos químicos están colocando muy bien sus productos fuera, lo que es interpretado por el Gobierno y la CEOE como un síntoma de que algo empieza a cambiar en la economía. La contención salarial ha permitido ganar en competitividad y eso empieza a notarse.