Cerco a la corrupción

Rosell licitó 37 contratos por valor de 52 millones antes de ser detenido

Dos de las licitaciones contemplan obras en sendos ayuntamientos de CDC registrados por la Guardia Civil. La relación de adjudicaciones fue publicada un día después del arresto en Infraestructures.cat

El director de Infraestructuras.cat, Antonio Rosell, a la derecha, en Tarragona
El director de Infraestructuras.cat, Antonio Rosell, a la derecha, en Tarragonalarazon

Rosell, responsable de Infraestructures.cat, comparece hoy ante el juez para abrir su caja fuerte. Dos de las licitaciones contemplan obras en sendos ayuntamientos de CDC registrados por la Guardia Civil

Infraestructures de la Generalitat de Catalunya tenía previsto licitar contratos de ejecución de obras por valor de 52.480.745 euros en los próximos seis meses, antes de que el director general de esta empresa pública catalana, Josep Antoni Rosell Polo, fuera detenido la semana pasada en el marco de la investigación de la llamada trama del 3%, una presunta red de financiación ilegal que habría desviado al menos 7,1 millones de euros. Concretamente, el informe que contiene la relación de contratos previsto tiene fecha del 22 de octubre de 2015, es decir, un día después de que tuviera lugar la detención de Rosell, hombre de confianza de Convergència situado al frente de Infraestructures.

Al menos dos de los contratos de ejecución previstos se refieren a obras que serán previsiblemente realizadas en ayuntamientos registrados por la Guardia Civil y la Fiscalía Anticorrupción. El primero de ellos consiste en la construcción de un instituto en Sant Cugat del Vallès por valor de 8.700.000. El otro contempla obras de ampliación en el instituto Baiz Montseny de San Celoni. Ambos ayuntamientos son gobernados por Convergència.

En total son 37 los contratos con costes previstos que van desde los 100.000 euros a los más de nueve millones de las obras de ensanchamiento de un andén en la estación de ferrocaril de Provença. Los contratos incluyen obras pertenecientes a diversos departamentos de la Generalitat. El departamento de Territorio y Sostenibilidad se lleva 18 de los contratos, incluidos los de mayor cuentía. Se trata de obras ferroviarias, mejoras de señalización, pavimentación, etc. La siguente partida más importante es la destinada a educación, con nueve contratos.

Los investigadores encargados de esclarecer las ramificaciones de la supuesta trama de financiación ilegal de Convergència estudian ya si Josep Antoni Rosell ha repetido el modus operandi ejecutado contratos anteriores, acciones que provocaron su detención en estos contratos previstos para los próximos 6 meses.

A este respecto, tal y como adelantó LA RAZÓN en su edición del pasado jueves, la Guardia Civil cuenta con el testimonio de varios empleados de la empresa pública que dirigía Josep Rosell los cuales han confesado que les obligaba a modificar los pliegos de condiciones de licitación de las obras para que fueran adjudicadas a, se supone, «empresas amigas» de las que cotizaban el 3%.

Las testificales, aportadas al juez de El Vendrell junto con otras numerosas evidencias, dejan pocas dudas de lo que ha ocurrido en el departamento de Rosell, que, a la postre, es la máxima mesa de contratación de obras de la Generalitat de Cataluña.

El hecho de que los investigadores hayan llegado por un lado a la cúpula del partido (CDC) y su fundación: y, por el otro, a la máxima mesa de contratación del Gobierno catalán, demuestra hasta qué punto la trama de corrupción del 3 por 100 impregnaba los sectores más influyentes de la política y la Administración.

En el caso de Viloca, en su agenda, de la que también informó en primicia LA RAZÓN, no había lógicamente anotaciones de reuniones con responsables del partido, porque nadie apunta cuándo va a ir de un despacho a otro, de un piso a otro. Pero se da por supuesto que informaba puntualmente a sus jefes de los distintos asuntos de la gerencia y tesorería del partido, entre ellos del 3%.

Para las entrevistas con los empresarios, no utilizaba siempre el mismo lugar. Las reuniones se solían celebrar en lugares como cafeterías, restaurantes, hoteles, etcétera.

Uun hombre de Germà Gordó experto en obra pública

Josep Antoni Rosell (Ivars de Noguera, Lleida, 1962) anida en las empresas públicas de la Generalitat desde hace más de 20 años. Titulado en Ingeniería Agrónoma, protagonizó su primer gran salto en el organigrama de la Generalitat en el año 2000 de la mano del que iba a ser su padrino en adelante, Germà Gordó (La Pobla de Segur, Lleida, 1963), uno de los hombres de la estrecha confianza de Artur Mas. Gordó era por entonces secretario general del departamento de Agricultura. Rosell siempre ha mantenido la confianza de Gordó, quien se convirtió en una pieza clave de CDC tras el pujolismo. Rosell pasó por la empresa privada durante los años del tripartito. Entre 2003 y 2009 fue director general de Aigües Segarra-Garrigues (ASG), una UTE formada por constructoras como FGC, Agbar, Copcisa y Copisa a la que él mismo adjudicó en 2002 la construcción de la parte catalana del canal Segarra-Garrigues.