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Moncloa mantendrá el diálogo público y discreto con la Generalitat

Fía el apoyo de PSOE y C’s y espera que el Govern no haga la consulta

El portavoz del Gobierno durante la rueda de prensa que ha ofrecido tras la reunión del Consejo de Ministros
El portavoz del Gobierno durante la rueda de prensa que ha ofrecido tras la reunión del Consejo de Ministroslarazon

Moncloa volvió a dejar ayer el mensaje de que el diálogo en relación a Cataluña «no tiene fecha de caducidad». El fracaso de la entrevista secreta que mantuvieron en enero el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, no ha afectado a esa disposición a la negociación pública y con contactos discretos entre miembros del Gobierno y representantes de la Generalitat, a su nivel, y con representantes de la sociedad civil catalana. Si bien, como informó este periódico el pasado martes, Moncloa no ve sentido a una nueva entrevista de Rajoy con Puigdemont si en la agenda no se incluyen otras cuestiones que no sea la exigencia de negociar el referéndum ilegal. Mientras tanto, el Ayuntamiento de Barcelona aprobó ayer una declaración institucional para sumarse al pacto por el referéndum.

«Nuestro diálogo no tiene fecha de caducidad. Estamos dispuestos a hablar de todo, pero siempre dentro de la ley», explicó ayer el portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, tras el Consejo de Ministros. Sobre la mesa siguen estando los 45 puntos, menos el referéndum secesionista, que en su día planteó la Generalitat, y que el Gobierno ha estudiado, implicando incluso en la preparación de documentos a los ministerios afectados para ver qué margen hay de ponerlos en marcha. Pero ésa es la oferta que el Ejecutivo lleva realizando desde que arrancó esta Legislatura. Sin que haya sido aceptada por la otra parte. Rajoy tiene cerrado el apoyo del PSOE y de C’s para actuar, jurídica y políticamente, si se llegase a ese escenario. «Está hablado. Ahí no habrá discusiones políticas o ideológicas». El PSC también estará del lado de la ley si llega el caso. «Las respuestas serán equilibradas, pero Rajoy está tranquilo porque tiene de su lado la fuerza de la ley», dicen en Moncloa.