Delito fiscal

El juez, a Mireia Pujol, tras no dar crédito a su versión sobre el legado: «Felicidades a su gestor»

Exculpa a su hermano Jordi y achaca a las inversiones del banco que su dinero se multiplicara

Mireia Pujol Ferrusola, a la salida de la Audiencia Nacional
Mireia Pujol Ferrusola, a la salida de la Audiencia Nacionallarazon

Exculpa a su hermano Jordi y achaca a las inversiones del banco que su dinero se multiplicara

Mireia Pujol, hija del ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol, aseguró hoy al juez de la Audiencia Nacional José de la Mata -que investiga el origen de la fortuna familiar en Andorra- que la

multiplicación de los fondos que le correspondieron del supuesto legado de su abuelo paterno -que pasaron de los iniciales 372.000 euros (62 millones de pesetas) de 1992 a 1,7 millones en cuatro cuentas andorranas- se debió a las inversiones efectuadas por sus gestores bancarios. Como sus padres y sus seis hermanos, tampoco aportó documentación que justifique esa herencia, algo que agotó la paciencia del magistrado, que esta vez optó por la ironía. “Felicidades a su gestor”, le espetó a la hija de Pujol tras escuchar por enésima vez idéntica versión exculpatoria ayuna de justificación documental alguna.

Como el pasado lunes sus hermanos Oriol y Marta, Mireia salió de la sede de la Audiencia sin ninguna medida cautelar, aunque continúa investigada por blanqueo en esta causa.

Sobre el origen de ese dinero que recibió en 1992, afirmó que confió en la versión familiar de que se trataba de un legado de su abuelo paterno, Florenci. Sin embargo, la declaración de Mireia Pujol sí tuvo un matiz diferencial respecto a la de sus hermanos, pues ella desvinculó al primogénito, Jordi, de la gestión de su patrimonio, un buen hacer que atribuyó únicamente a sus gestores bancarios, a quienes en 2010 sólo dio una consigna: que movieran su dinero en “inversiones seguras”.

Según fuentes jurídicas, afirmó al juez y a los fiscales Anticorrupción que en los años 90 no se interesó por esos fondos porque tenía su trabajo (se dedicaba al baile) y “no le hacía falta”. Sí reconoció que, cuando en 2014 regularizó con Hacienda 1.072.767 euros de sus cuentas andorranas, retiró 170.000 euros para su centro de fisioterapia y para “ayudar a la gente”, una labor altruista que no precisó. Y llegó a admitir, según esas mismas fuentes, que quizá debería haber regularizado antes ese dinero oculto y que, por consejo de sus gestores bancarios, constituyó una fundación en Panamá junto a su hermana Marta para trasladar allí sus fondos en 2012.

El abogado de la acusación popular que ejerce Podemos -a quien sí contestó a diferencia de su hermana Marta el día anterior- le preguntó si le parecía ético haber depositado esos fondos en Andorra y no en España para ocultarlos a Hacienda. Mireia Pujol, según testigos presenciales, asumió que era consciente de que no debía ingresar esa cantidad en España.

En su comparecencia en la Audiencia Nacional, la hija de Jordi Pujol aseguró que su padre se desentendió desde un primer momento de ese legado, con el que su abuelo Florenci quería que la familia de su hijo se garantizase una estabilidad económica. De la Mata mostró entonces su extrañeza por el hecho de que dejase al margen de ese supuesto legado a la hermana del ex president y a sus hijos. “¿No eran familia”?, le preguntó. “De eso prefiero no hablar”, se limitó a contestar ella.