Política

Elecciones 24-M

El nuevo pacto del Tinell «anti PP»

PSOE, IU, Podemos y UPyD sellan en Murcia un acuerdo para que los populares no gobiernen. Ciudadanos anunció que se retiraba del «boicot» a Rajoy ayer a última hora

Los representantes de PSOE, IU Ganar la Región de Murcia, UPyD y Podemos tras firmar el pacto
Los representantes de PSOE, IU Ganar la Región de Murcia, UPyD y Podemos tras firmar el pactolarazon

PSOE, IU, Podemos y UPyD sellan en Murcia un acuerdo para que los populares no gobiernen. Ciudadanos anunció que se retiraba del «boicot» a Rajoy ayer a última hora

PSOE, Podemos, IU y UPyD han dejado hoy una singular foto en Murcia. En esta imagen estaba previsto que también estuviera el representante de Ciudadanos, dibujando así una alianza que recordaba a aquel Pacto del Tinell en el que los socialistas formaron gobierno con ERC e ICV en 2003, y que incluía la siguiente cláusula: «Los partidos firmantes del presente acuerdo se comprometen a no establecer ningún acuerdo de gobernabilidad, acuerdo de legislatura y acuerdo parlamentario estable con el PP en el Gobierno de la Generalitat. Igualmente se comprometen a impedir la presencia del PP en el Gobierno del Estado y a renunciar a establecer pactos de gobierno y pactos parlamentarios estables en las cámaras estatales». Sin embargo, a última hora el candidato de Ciudadanos se descolgó de lo acordado, posiblemente para evitar esta lectura y no ver perjudicados los intereses electorales del partido en todo el mapa nacional.

Aunque en el último momento Ciudadanos se haya desmarcado de lo que había bendecido previamente en sus conversaciones, esta singular imagen que hoy se ha visto en Murcia contiene, inevitablemente, una lectura paralela de declaración de principios ante las próximas elecciones del 24 de mayo, la de todos contra el PP, de la que ya hay precedentes. Además, las sospechas sobre que pueda tener su continuidad en otras comunidades autónomas y ayuntamientos son perfectamente legítimas. De hecho, ha habido conversaciones embrionarias para exportarla a otras «plazas» en juego para que sirviese de mecanismo eficaz con el que dejar al PP fuera del Gobierno aunque fuese la lista más votada.

Las justificaciones para sellar el acuerdo que implícitamente lleva a intentar desalojar al PP del poder se tienen que adaptar a las circunstancias de cada Gobierno autonómico y municipal. Por ejemplo, en Burgos también se han iniciado contactos embrionarios para explorar esta posibilidad, aunque, de momento, no hay acuerdo entre todas las partes.

En el caso de Murcia, la alianza se ha presentado como un pacto por la regeneración, que incluye mantras como el de la reforma de la ley electoral para favorecer la pluralidad y la representatividad en el Parlamento autonómico; o una ley de consultas para impulsar la participación de los ciudadanos en el Gobierno regional. También incorpora un compromiso que afecta a la gobernabilidad de Murcia en el caso de que ningún partido, como apuntan las encuestas, consiga la mayoría absoluta. Las cuatro fuerzas, y Ciudadanos hasta que ayer se apartó, sostienen que no pactarán con ninguna formación que incluya imputados en su lista, y ésta es la excusa para dejar fuera al PP. Según la mayoría de los sondeos, los populares serían el 24 de mayo la fuerza más votada, aunque sin alcanzar la mayoría absoluta.

Curiosamente, el candidato del PP, Pedro Antonio Sánchez, ha sido víctima de 16 denuncias presentadas por el PSOE en Puerto Lumbreras, donde él era alcalde, y siempre han coincidido en sus tiempos con la proximidad de elecciones y los intereses de partido de los socialistas. Las dieciséis han sido archivadas. Pedro Antonio Sánchez no lleva a ningún imputado en su candidatura. Sí hay dos alcaldes en esa situación, que repiten como candidatos en sus respectivos municipios.

El PP de Murcia asegura que ninguno de estos partidos se ha dirigido a él para hacerle partícipe del acuerdo, lo que confirma que es «un pacto dirigido contra el PP». «Van a intentar explicarlo de otra manera, pero lo grave es lo que no conocemos, lo que están ocultando con él», sentencian, al tiempo que recuerdan que los «tripartitos y cuatripartitos» alcanzados de igual forma en otras comunidades han terminado siempre con recorte de libertades.

Este pacto contra el PP podría ser un botón de muestra de una fórmula electoral extrapolable a otros territorios como Madrid, donde el candidato Antonio Miguel Carmona ha expresado ya su voluntad de alcanzar un pacto con Ciudadanos; Andalucía, donde Podemos y los de Rivera serán decisivos en la investidura o Valencia, donde sólo una coalición de izquierdas podrá aupar al PP del Gobierno.

Historia de un boicot

El desgaste de CiU tras seis legislaturas en el gobierno catalán lideradas por Jordi Pujol propició que en las elecciones autonómicas de noviembre de 2003 hubiese un cambio de rumbo en la Generalitat. Así, surgió una coalición tras la firma del Pacto del Tinell por el Partido Socialista de Cataluña, Esquerra Republicana y la coalición formada por ICV e Izquierda Unida (EUiA), por lo que se excluía de facto al Partido Popular. El acuerdo estaba encabezado por el socialista Pasqual Maragall. Los tres partidos sostuvieron que en virtud de dicho acuerdo el Gobierno fuera catalanista y de izquierdas. Tras las elecciones al Parlamento de Cataluña de 2006, la coalición de izquierdas volvió a acordar formar gobierno, esta vez presidido por el líder del PSC, José Montilla y bajo el nombre de «Govern d’Entesa».