Independentismo

El «procès» no cuaja en 13 municipios del País Vasco

La ANC vasca saca urnas y emula un referéndum de carácter soberanista

El municipio de Mundaka (Vizcaya), ayer, en una de las carpas donde votaron «a la catalana»
El municipio de Mundaka (Vizcaya), ayer, en una de las carpas donde votaron «a la catalana»larazon

La ANC vasca saca urnas y emula un referéndum de carácter soberanista.

Ni siquiera las urnas de plástico confeccionadas en China utilizadas en el «procés» han servido de gancho para movilizar a la sociedad vasca. Ayer alguna de ellas fueron colocadas en las improvisadas sedes electorales de 13 municipios, todos ellos localizados en territorio vizcaíno, menos dos guipuzcoanos, en los que se celebraron a lo largo del domingo consultas por el llamado «derecho a decidir».

Las movilizaciones organizadas por la plataforma «Gure Esku Dago» (está en nuestras manos) volvió a cosechar una discretísima participación popular incluso por debajo de los porcentajes de voto que las formaciones nacionalistas ostentan en los municipios llamados a votar. En Andoain, Areatza, Atxondo, Beizama, Berango, Erandio, Elantxobe, Galdakao, Mundaka, Ibarrangelu, Otxandio, Leioa y Getxo sólo habían logrado movilizar hasta las cinco y media de la tarde al 11% del censo, que incluye también a menores con 16 años cumplidos.

El movimiento no consiguió ni de lejos movilizar a la ciudadanía como si hizo sus homólogas Òmnium Cultural y la Asamblea Nacional Catalana. No les falta el apoyo de los medios de comunicación nacionalistas y la complicidad manifiesta del grupo público de comunicación EITB, pero la apuesta sigue sin cuajar y chirría mucho más cuando intenta acercarse a núcleos de población importantes como quedó de manifiesto ayer en Getxo.

Las consultas auspiciadas por «Gure Esku Dago» no son nuevas desde su presentación en sociedad en junio de 2013. Realizaron movilizaciones en 167 municipios con la participación de cerca de 155.000 personas. La evidencia demuestra que a los vascos no les seduce la llamada «vía catalana» y que más allá de las típicas declaraciones de votantes a pie de urna «envidiando» el camino emprendido por el independentismo catalán y las manifestaciones en contra de la aplicación del 155, la ciudadanía prefiere seguir mirando los toros desde la barrera y esperar a coyunturas políticas menos adversas ante el fiasco de la nueva República Catalana. Para lograr una verdadera movilización hay que tener un perfecto manual de agitación de multitudes en el que la verdad de los argumentos debe quedar supeditada al interés nacional. Y el verdadero poder económico y político –representado por el PNV– pasa del apoyo testimonial a mostrar su disposición a sostener y financiar un andamiaje tan costoso como el del «procés». «Tejer, consensuar y decidir» son los lemas de la plataforma Gure Esku Dago y mientras sigan fieles a sus dos primeros principios sus «éxitos» no serán homologables a los de sus asociaciones amigas catalanas, para bien de los vascos.