Política

Sevilla

Díaz, «referente nacional» del PSOE

Tras ser «legitimada» por la urnas ya maneja el calendario para desembarcar en Ferraz

La presidenta de Andalucía, Susana Díaz, en un acto de campaña
La presidenta de Andalucía, Susana Díaz, en un acto de campañalarazon

El objetivo de la secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, era ganar las elecciones europeas y anotarse su primera victoria electoral a los ocho meses de relevar a José Antonio Griñán al frente de la Junta, una meta que la noche del domingo superó con holgura. Su partido obtuvo en la comunidad el 35,15% de los votos (932.057), frente al 25,86% del PP (685.868), convirtiéndose en la primera opción de los ciudadanos en siete de las ocho provincias andaluzas y rompiendo la racha encadenada de tres derrotas en las municipales de 2011, las generales de ese año y las autonómicas de marzo de 2012. De hecho, hacía cinco años que en San Vicente –sede regional de la formación– no se celebraba un buen resultado: el de las europeas de 2009, cuando aventajaron al PP en 8,5 puntos, 0,7 menos que ahora.

Una lectura positiva que se amplifica si se tiene en cuenta que el PSOE-A aportó el 26 por ciento del total de los votos arañados por el partido en todo el territorio español, lo que contribuyó a paliar la caída de la candidatura que encabezaba Elena Valenciano.

En palabras del secretario regional de Organización, Juan Cornejo, Andalucía «ha actuado como un muro para frenar la situación en el resto del país, que no era muy buena», según sostuvo ayer.

La victoria del 25-M ha convertido a una Díaz «legitimada» ya por las urnas en «el gran referente nacional» del socialismo, según sus compañeros de «aparato» autonómico. Y ello, pese a que un sector minoritario del partido cree que «no se puede sacar pecho por unos resultados que suponen 13 puntos menos que en las europeas de 2009 y que evidencian un toque de atención de la ciudadanía, aunque en la comunidad se haya notado menos al contar con un colchón más amplio».

En cualquier caso, la incuestionable fuerza de la líder trianera continúa en ascenso, lo que, según otras fuentes socialistas, «le facilitaría el poder reubicarse en el panorama nacional». ¿A qué se refieren? Un sector del PSOE-A baraja desde hace meses la teoría de que la presidenta de la Junta sigue «una hoja de ruta» que pasa por «forzar la salida de Rubalcaba –aún secretario general del PSOE–y urgir a la convocatoria de un Congreso extraordinario en el que se la encumbre como su sucesora, ya que controlaría a los delegados», lo que, según sus tesis, supondría que «volverían a celebrarse unas primarias descafeinadas a la andaluza», en las que «todos los condicionantes del proceso vuelvan a ponerse a su favor porque, ¿qué mejor que la flamante nueva secretaria general sea la candidata?», deslizan.

De momento, «autodescabalgado» Rubalcaba –las mismas fuentes dan por hecho que presionado por Díaz–, el congreso será los días 19 y 20 de julio y habrá que esperar para saber si la líder del PSOE andaluz elige dar el salto a la arena estatal.

En relación al manejo de los tiempos, la baronesa socialista es la única con potestad para tomar otra decisión sobre una hipótesis repetida en los últimos meses: un adelanto de las elecciones andaluzas. Díaz lo descartó en campaña, con independencia del resultado del domingo, porque su prioridad es la creación de empleo y cumplir con los compromisos adquiridos con los andaluces. Si bien, según una extrapolación de los resultados del 25-M a unas autonómicas que manejaban ya ayer los socialistas –PSOE, 51; PP, 35; IULV-CA, 12; UPyD, 6 y Podemos, 5–, no faltarán compañeros de siglas que animen a la presidenta de la Junta a apresurar los comicios regionales. Por ahora, Díaz subrayó el triunfo del partido que lidera como el «primer fruto» del nuevo tiempo que prometió. ¿Alcanzará a Ferraz? «Siempre pone las velas donde sopla el viento, así que no es descartable», avisan desde Andalucía.