Iceta insiste en que pedirá el indulto para los dirigentes soberanistas y el PSOE se desmarca

El candidato del PSC a la Generalitat, Miquel Iceta, ha reiterado hoy que, si es presidente, pedirá el indulto para los dirigentes independentistas "si hay sentencia condenatoria", ya que ha considerado que en Cataluña se tienen que "cerrar heridas y resolver problemas".

Tras un tiempo de cierta calma, PSC y PSOE vuelven a tener un conflicto sobre la mesa. El origen de las tensiones procede de la estrategia electoral de Miquel Iceta, que ha optado por basar su campaña en presentar a un PSC catalanista y empático con los votantes que antiguamente apoyaban al nacionalismo moderado. Siguiendo este guión, Iceta defendió ayer –de nuevo– la conveniencia de indultar a los dirigentes soberanistas que acaben con sentencias condenatorias. «La democracia tiene mecanismos para suavizar, aligerar y coser heridas que tienen un conflicto político, aunque hayan llevado eventualmente a la comisión de algún delito», subrayó el líder del PSC en Rac1.

No es la primera vez que Iceta se expresa en términos semejantes, pero ayer el PSOE se vio obligado a reaccionar y no pudo ocultar su contrariedad respecto a la posibilidad de indultar a los dirigentes soberanistas que llevaron el desafío a un punto desconocido. «Respetamos la opinión de Miquel Iceta. Es su opinión», dijo la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, visiblemente incómoda.

Dirigentes del PSOE admitieron, a micrófono cerrado, su molestia por una propuesta que vuelve a situar a los socialistas en connivencia con el soberanismo y a dejar en entredicho las decisiones judiciales relacionadas con el «procés». En todo caso, los socialistas españoles quisieron evitar a toda costa un incendio con el PSC para no perjudicar las expectativas electorales de Iceta, a quien en las encuestas sitúan como cuarta fuerza.

Quien no se ahorró un comentario ácido fue el PP, cuyo secretario general del grupo en el Congreso, José Antonio Bermúdez de Castro, recordó que los indultos buscan «corregir» situaciones de «injusticia». Por su parte, el candidato del PPC, Xavier García Albiol, también cargó contra Iceta: «Menos preocuparse de indultos y más preocuparse de 470.000 catalanes que están en paro», señaló. En esa línea crítica se manifestó Ciudadanos. «Si quieren indultos a políticos, vote PSC-PSOE», dijo Albert Rivera en Twitter.

En estos días, Junts per Catalunya –la candidatura de Carles Puigdemont– ha iniciado una ofensiva contra el PSC para desacreditar su talante catalanista por haber dado apoyo al artículo 155. El cuerpo a cuerpo también se trasladó al primer debate de campaña en TVE, donde Jordi Turull buscó el duelo con Iceta por alinearse con el PP.

Lo cierto es que Iceta no se siente cómodo alineado con el PP. Y cada vez que se le culpa de haber dado apoyo el 155 recuerda que Puigdemont pudo evitarlo si hubiera convocado elecciones. El primer secretario del PSC no quiere dar cuerda a un pacto con los populares de García Albiol y tampoco piensa entregar, asegura, la presidencia a los independentistas.

De hecho, su insólita aspiración –a la vista de las encuestas– es convertirse en president, un cargo para el que se ve idóneo por su capacidad como pactista. Ayer fue más allá y se comprometió a renunciar a la presidencia en dos años si no logra «frutos» ni «resultados» en forma de acuerdos en ese plazo.