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La coalición Podemos-IU daría el «sorpaso» al PSOE

La coalición Podemos-IU daría el «sorpaso» al PSOE
La coalición Podemos-IU daría el «sorpaso» al PSOElarazon

Si hoy se repitiesen las elecciones generales, una coalición electoral de las dos fuerzas a la izquierda del PSOE, sumaría el 23,9% del voto válido, frente al 22,1% del PSOE. Los comunistas sumarían 5.592 millones de votos, mientras que los socialistas reunirían 5.171 millones. lo que supondría el «sorpasso» de la alianza Iglesias-Garzón a Sánchez.

Esta alianza electoral superaría al PSOE en 0,421 millones de votos y 1,8 puntos porcentuales y tendría un importante significado cuantitativo y cualitativo, pues supondría el inicio de la «pasokización» del PSOE en términos absolutos y relativos. Los socialistas mantendrían una ventaja en diputados –debido al sistema electoral español– que convierte a la provincia en circunscripción electoral y el PSOE sería más votado que la alianza comunista en un mayor número de provincias, aunque no en las más pobladas, pero sí lo suficiente para acumular entre 13 y 15 diputados más que el tándem Podemos-IU.

El voto de la coalición Podemos-IU es eminentemente urbano. En las diez principales ciudadades del país: Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Zaragoza, Málaga, Murcia, Palma de Mallorca, Las Palmas y Bilbao obtendrían una media de porcentaje de voto superior a la que tendrían en el conjunto nacional. Estas ciudades representan el 20,2% del censo electoral español.

Podemos e IU concentran en estas urbes el 20,2% de su electorado. Estos partidos obtienen en estas ciudades el 24,7% de sus votos. Mientras, el PSOE es el que menos voto urbano atrae, ya que sólo suma el 15,8% de sus votos en las diez grandes concentraciones urbanas del país, quedando 4,3 puntos porcentuales de su media nacional.

Si nos centramos en las tres grandes ciudades, que representan el 12,4% del censo, confirmamos la misma tendencia: Podemos e Izquierda Unida registran en estos tres municipios el 14,3% y el 13,9 % de su electorado, mientras que el PSOE cae al 8,7%.

Por el contrario, en los municipios de menos de 50.000 habitantes el PSOE obtiene el 55,1% de sus votos y le sigue el PP, que recibe el 51% de sus papeletas. Por su parte, Izquierda Unida y Podemos sólo reciben el 39,8% y el 37,9% en estas zona menos urbanas.

La región española con mayor población residente en municipios de menos de 50.000 habitantes es Andalucía, donde el PSOE cosecha el 25,4% del total de su voto nacional, porcentaje revelador de la importancia del voto rural para el PSOE.

En escaños queda aún más clara la ventaja de los socialistas en diputados a pesar de quedar por debajo de Podemos-IU en voto. Por ejemplo, en las 11 circunscripciones menores, aquellas con 1, 2 o 3 escaños, que en total suman 28 parlamentarios, la coalición comunista quedaría sin representación. Entre las que 9 provincias con 4 escaños están en juego 36 diputados, de los que sólo 7 a 8 irían a Podemos e Izquierda Unida. En el siguiente tramo, en las 8 circunscripciones de 5 escaños, la coalición Podemos-IU podría aspirar a 8 o 9 parlamentarios, sobre un total de 40 diputados. En las 7 provincias con 6 escaños, el frente Podemos-IU sumarían de 7 a 8 escaños de un total de 42 diputados. En las 4 provincias de 7 escaños, que suman 28 parlamentarios, se llevarían de 6 a 7 escaños.

En las elecciones del 20-D, la diferencia en votos entre Podemos e IU con respecto al PSOE fue aún mayor a favor de los socialistas, debido al deterioro experimentado en los últimos meses por Podemos que la ligera recuperación de IU no ha podido compensar, mientras que el PSOE permanece estancado. Si Iglesias no hubiese cometido el error de arruinar las posibilidades de un acuerdo con IU en las elecciones generales del 20-D, el bloque comunista habría recibido 6,1 millones de votantes, frente a los 5,5 millones de votos del PSOE. Es decir, que la coalición Podemos-IU habría captado el 24,3% del voto válido, mientras que los socialistas recibieron el 22,0%. La diferencia habría sido de 2,3 puntos porcentuales y de 0,6 millones de votantes a favor de los comunistas, pero los socialistas se hubieran impuesto en escaños, pero por tan sólo 8 diputados, con 85 u 86 escaños frente a los 77 o 78 que hubiesen sumado Podemos-IU.

Iglesias, que impidió el acuerdo con Garzón en diciembre de 2015, necesita ahora el entendimiento con Izquierda Unida, que en poco más de tres meses ha pasado de una expectativa de voto del 3,7% al 4,4% y cuyo electorado ha crecido en este periodo de 0,923 millones de votantes a 1,032, al tiempo que Podemos ha retrocedido en este mismo tiempo 1,1 puntos y 0,629 millones de votantes.