Navarra

La madre de un guardia civil agredido: «¿Por qué a nosotros no vienen a apoyarnos?»

Podemos celebró el Día de Navarra en Alsasua para demostrar que es «un pueblo tranquilo», pero para la familia de los agentes «es un acto reivindicativo en apoyo al entorno abertzale»

«Una comida de empresa». Así definían ayer en Alsasua el acto organizado por Podemos para conmemorar el Día de Navarra. Banderas de independencia en el discurso de la líder del partido morado en Navarra que calificó de desproporcionado que se acuse de terrorismo a los jóvenes que golpearon a los guardia civiles
«Una comida de empresa». Así definían ayer en Alsasua el acto organizado por Podemos para conmemorar el Día de Navarra. Banderas de independencia en el discurso de la líder del partido morado en Navarra que calificó de desproporcionado que se acuse de terrorismo a los jóvenes que golpearon a los guardia civileslarazon

Podemos celebró el Día de Navarra en Alsasua para demostrar que es «un pueblo tranquilo», pero para la familia de los agentes «es un acto reivindicativo en apoyo al entorno abertzale»

Ayer en Alsasua, coincidiendo con la celebración del día de Navarra, tuvo lugar un acto de apoyo a los ocho radicales detenidos por agredir brutalmente a dos guardias civiles y a sus parejas hace poco más de un mes en la misma localidad. Con motivo de la celebración del día navarro, Podemos aprovechó para festejar allí una reunión abierta a la ciudadanía.

El partido morado es partidario de que los siete encarcelados sean juzgados en Navarra. Incluso los apoyaron hace una semana en una manifestación en la que se pedía la libertad de éstos, y algunos de los dirigentes morados en la comunidad arroparon a las familias de los detenidos. El propio Gobierno navarro, presidido por Uxue Barkos, también apoyó abiertamente la concentración y tildó de «innecesaria» la detención. Para Barkos «se les podría haber llamado a declarar sin detenciones».

Lo que para el partido morado es una celebración sin ningún tipo de intención reivindicativa y que tiene el objetivo de demostrar que Alsasua es «un pueblo tranquilo», según explicaron fuentes del propio partido a LA RAZÓN, para los familiares de las víctimas no lo es. Para una de las madres de los guardia civiles agredidos hace un mes, «no es una celebración normal», puesto que en su opinión «se convierte en un acto reivindicativo en apoyo al entorno abertzale , a los agresores, a los presos, a los que intimidan». Inma Ballesteros, madre del teniente que sufrió una fractura de tobillo y numerosas contusiones, explicó a este diario que a su entender un «grupo político que acuda a esta celebración se posiciona «claramente del lado equivocado». A diferencia de la visión tranquila que ha intentado transmitir Podemos con la celebración del día de Navarra en la localidad, en opinión de la madre del teniente «ni en Alsasua ni en otros pueblos de la zona existe la normalidad democrático». Para ella, la tensión «es más que evidente» y «sólo salen a la calle los de un lado», en referencia a la manifestación de apoyo a los radicales. ¿Por qué el otro lado, no puede manifestarse?

Ballesteros también reflexiona sobre la actuación del Parlamento Navarro y del propio Ayuntamiento de Alsasua, que recibió a las familias de los agresores, y no a los familiares de los agredidos. «Más partidista no se puede ser», lamenta. Esta semana el Parlamento Navarro se reunió con los familiares de los 11 jóvenes procesados por terrorismo por las lesiones que sufrieron los dos guardia civiles. Concretamente, los familiares solicitaron «amparo» al Parlamento para que los siete encarcelados vuelvan a casa.

Al hilo de esta reunión, la madre del teniente se pregunta también por qué el Parlamento no ha llamado a la «otra parte», aunque reconoce que ellos tampoco lo han intentado. «No nos han llamado, ni nosotros tampoco», aunque sí que contempla que es «llamativo» que se reúnan con la parte «agresora» y no con ellos. Afortunadamente, esta mujer recibe «el apoyo y el cariño de la mayoría de personas de bien», y explica que «confía en la Justicia» y cree que será la que ponga «a cada uno en su lugar».

Las declaraciones judiciales de los agredidos ante la juez que lleva el caso en la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, a las que Cadena Ser tuvo acceso son claras. En la paliza, los detenidos contaron con el apoyo de más de 30 personas. Las víctimas explican que el grupo los rodeó y comenzaron a insultarlos y agredirlos: «Tenéis lo que os merecéis, idos de aquí, hijos de puta, (...) putos picoletos, txakurrak (perros), alde hemendik! (¡fuera de aquí!)» En el exterior, la agresión continuó con más golpes. María José, novia del teniente agredido, vio cómo «quienes más fuerte golpeaban iban encapuchados». Golpearon sin miramiento, dando patadas incluso en la cabeza», explicó.