El desafío independentista

Los CDR utilizaban códigos de seguridad a la espera de “una reunión con 'los Presis'”

Recurrían a un código negro para transmitir información “lo más clandestina posible” y planearon "la encriptación de todos los emails a nivel de Cataluña"

Recurrían a un código negro para transmitir información “lo más clandestina posible” y planearon "la encriptación de todos los emails a nivel de Cataluña".

El miembro de los Comités de Defensa de la República (CDR) encargado de las telecomunicaciones, Ferran Jolis -uno de los siete en prisión provisional desde el pasado septiembre-, estableció un “protocolo de seguridad y transmisión de información” a través de códigos de colores y llegó a planear “la encriptación de todos los emails a nivel de Cataluña”, algo que al final no se llevó a cabo al abandonar la Comisión Nacional de Seguridad (CNS). Así consta en una conversación grabada por la Guardia Civil a Jolis en octubre del pasado año, en la que asegura a su pareja, Mireia, que “está esperando a que le digan cuándo es la reunión con “los Presis””. Esta última le comenta que le han pasado una “información crítica”, un “código azul”, y se pregunta “qué coño es eso”. Jolis le aclara que ese código azul no existe y que en el protocolo de seguridad que él mismo ideó solo hay cuatro colores: negro, rojo, verde y amarillo.

El código negro, explica, se utiliza “cuando se tiene que transmitir una información presencialmente lo más clandestina posible”. El rojo, continúa, “es para personas de confianza y algún signal de máxima confianza”. El amarillo, “nada más para grupos de CDR, pero no por redes sociales”. Y, por último, el verde es un canal “abierto”.

El integrante de los CDR investigado por terrorismo recuerda que en la jornada del referéndum ilegal del 1-O introdujo todas las votaciones a través de “una UEPN” en Holanda y así pudieron “contrarrestar los ataques de los hackers del Estado”. Entonces, añade, él no tenía mucho contacto con los hackers del 1-O, pero a raíz de eso “contactó con uno” y le ofrecieron “introducirse en la Comisión Nacional de Ciberseguridad”, pero allí -se queja- “eran muy técnicos y dinamizar todo el equipo era muy difícil”.

En otro momento de la conversación, Jolis explica que “tiene conversaciones con un tal Carlos, que hablan sobre Puigdemont y que le hace gracia ya que él lo conoce”. Y detalla que va “con cuatro líneas de seguridad” y dependiendo del nivel de alerta “tiene que hacer unos protocolos u otros a nivel personal” con gente “que le cubre las espaldas”.

El supuesto responsable de las comunicaciones en el ERT afirma conocer a Jordi Cuixart, condenado a nueve años de cárcel por sedición por su papel en el “procés”, y dice que el líder soberanista “se queja porque Òmnium (Cultural) va a lo suyo” y que la Asamblea Nacional Catalana (ANC) “ahora comienza a cambiar que está la Paluzie -investigada por la Fiscalía de Barcelona por incitación al odio a cuenta de sus polémicas declaraciones sobre los incidentes violentos en Barcelona- con una buena dirección”. Asimismo, según él Cuixart lamenta que “los de Esquerra le han traicionado” y asegura que el PDeCAT “al único que sirve es al Torra, que está por los que está”.

Del mismo modo, presume de que la hermana de Carles Puigdemont “solo le tiene que llamar o mandar un “signal” diciéndole “ya está” y él se lo manda todo”, y que es “la segunda vez que le mandan blindarle las comunicaciones”. Y se queja de que él y su equipo “hacen la faena bien y rápido y ellos no hacen nada”, antes de recordar que “se tiene que reunir con Torra” en relación con el plan de los CDR de ocupar una semana el Parlament el “día D” como respuesta a la sentencia del “procés”.