Casa Real

Los Reyes de Holanda y Noruega invitan a la Infanta y a Urdangarín a sus aniversarios

Rechazan asistir a la fiestas organizadas por el Rey Guillermo Alejandro en abril y Harald y Sonia en junio por mantener un «perfil bajo».

Los ex Duques de Palma, a su llegada a la catedral de Nuestra Señora en Copenhague por la boda del príncipe Federico de Dinamarca y la australiana Mary Donaldson
Los ex Duques de Palma, a su llegada a la catedral de Nuestra Señora en Copenhague por la boda del príncipe Federico de Dinamarca y la australiana Mary Donaldsonlarazon

Rechazan asistir a la fiestas organizadas por el Rey Guillermo Alejandro en abril y Harald y Sonia en junio por mantener un «perfil bajo».

La incógnita sobre quién acudirá en representación de la Corona española al 50 cumpleaños del Rey Guillermo Alejandro de Holanda a finales de abril y al 80 de Harald y Sonia de Noruega en junio sigue sin despejarse, pero este periódico ha podido saber quiénes estaban invitados: Doña Cristina e Iñaki Urdangarín. Una invitación que han declinado porque prefieren mantener un perfil bajo público.

Existe una línea apenas imperceptible, y que en ocasiones es difícil de no borrar, entre la vida privada y pública de quien pertenece a la realeza. A pesar de la implicación de Doña Cristina e Iñaki Urdangarín en el «caso Nóos», a lo largo de los años la Infanta Cristina ha ido tejiendo una estrecha relación con los miembros de otras Casas Reales, como quedó reflejado el mismo día de su boda en 1997, a la que acudieron representantes de diez monarquías reinantes, entre las que figuraron la de Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Suecia y Noruega. De hecho, en los arsenales reales quedan recogidas las imágenes del 70 cumpleaños de Harald de Noruega en 2007: fueron los entonces Reyes de España, Don Juan Carlos y Doña Sofía, acompañados por su hija Doña Cristina y su marido, quienes acudieran a la cena de gala en el palacio de Skaugum entre medio centenar de miembros de la realeza europea. Urdangarín hubiera podido acudir ya que el tribunal no le ha impedido salir del país, siempre y cuando sea notificada la salida.

No es la primera vez que los ex Duques de Palma cancelan su asistencia a un acto que congregue a las monarquías europeas; en 2014, a pesar de estar invitados, no aparecieron en las bodas de oro de Constantino y Ana María de Grecia. Esa línea apenas imperceptible mencionada unas líneas arriba se borró en el funeral de Kardam de Bulgaria, al que le unía una buena amistad. Otro caso en el que hubiera sido implanteable la ausencia de Doña Cristina es el funeral en recuerdo de su abuelo, Pablo de Grecia, en 2014. Pero no todo son coincidencias en grandes fastos o momentos determinantes. A veces, sólo es una comida para ponerse al día tras una reunión de trabajo en el restaurante Mosaic del hotel Hilton después de un día de trabajo en Barcelona en 2009, entre Doña Letizia, Máxima de Holanda y Doña Cristina.